A mediodía, cientos de personas se reunieron para protestar, lanzando por momentos piedras contra la policía que replicó con cañones de agua y gases lacrimógenos. Diez personas fueron detenidas, según testigos. La policía prohibió al corresponsal de la AFP hablar con los manifestantes.
La tensión es particularmente grande desde el miércoles en la noche luego de un ataque aéreo que provocó la muerte de 35 contrabandistas kurdos que fueron confundidos con rebeldes, en la frontera kurdo-iraquí.
El viernes, el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, lamentó este hecho “desafortunado y lamentable”, y presentó sus condolencias a los parientes de las víctimas.