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Evolución del salario mínimo en Guatemala: una década de desafíos y ajustes

Entre 2013 y 2022, el salario mínimo en Guatemala subió Q700, pero la canasta básica ampliada mostró un déficit promedio de Q5 mil mensuales, afectando a familias vulnerables.

La mano de una persona organizando una caja con monedas

El salario mínimo en Guatemala ha sido objeto de debate durante años, con incrementos que no logran cubrir la canasta básica ampliada, evidenciando una constante disparidad entre ingresos y necesidades esenciales. (Foto, Prensa Libre: Unsplash)

En Guatemala, la fijación del salario mínimo ha sido, año tras año, un tema central de debate entre trabajadores, empleadores y autoridades. No obstante, a pesar de los ajustes realizados en la última década, expertos aseguran que estos incrementos han sido insuficientes para cubrir la canasta básica familiar, reflejando una brecha persistente entre el ingreso mínimo y las necesidades básicas de los hogares. 

Un hecho relevante ocurrió en 2013, cuando, por primera vez desde 1995, el Consejo Nacional del Salario (CNS) logró un consenso para fijar el salario mínimo, lo que permitió que este se estableciera a través de la comisión, sin necesidad de un decreto presidencial. En ese año, se acordó que los trabajadores de los sectores agrícola y no agrícola recibirían un salario mensual base de Q2,282.47, mientras que los empleados del sector exportador y de maquila percibirían Q2,095.10. En ambos casos, se sumaba una bonificación incentivo de Q250.00 mensuales. 

Sin embargo, al analizar el período comprendido entre 2013 y 2022, el salario mínimo solo aumentó en Q708.11 para el sector maquila, Q700.80 para el sector agrícola y Q787.49 para el sector no agrícola. Estos incrementos resultaron modestos frente al aumento del costo de vida en el país. 

Según el Boletín de Economía del Instituto de Investigaciones Económicas y Sociales (IIES-Usac) de noviembre de 2023, durante este mismo periodo la canasta básica ampliada experimentó un aumento superior a Q550.00. Cabe destacar que esta canasta, vigente desde 2018, no solo considera alimentos, sino también otros gastos esenciales como vivienda, ropa y servicios básicos. No obstante, al comparar el salario mínimo de entonces con la canasta básica ampliada, se evidenció un déficit de Q5,018.13, una cifra que refleja la disparidad significativa entre los ingresos y las necesidades económicas de las familias guatemaltecas. 

Incrementos moderados y desigualdad histórica

Un análisis del histórico salarial entre 2013 y 2019 muestra que los aumentos anuales se situaron entre el 2% y el 5%. Durante este período, los sectores agrícola y no agrícola compartían el mismo rango salarial, mientras que el sector de maquila y exportaciones se mantenía por debajo de la media, marcando una tendencia de desigualdad en los ingresos laborales. 

Entre 2009 y 2019, según el Boletín económico de la Universidad de San Carlos de Guatemala (Usac), los salarios mínimos en Guatemala experimentaron varios cambios significativos. En 2010, los salarios mínimos para actividades agrícolas y no agrícolas se fijaron en Q1,953.33, cubriendo el 91% del costo de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) y el 50% de la Canasta Básica (CA). Sin embargo, a lo largo de los años, la capacidad de los salarios mínimos para cubrir estos costos fue disminuyendo. 

Para 2016, el salario mínimo se fijó en Q2,747.04, lo que representó solo el 69% de la CBA y el 38% de la CA. En 2020, los salarios mínimos finalmente superaron el costo de la CBA, excepto en el caso de las actividades de exportación y maquila, que cubrieron el 95% de la CBA.   

Sector laboralSM 2013SM 2014SM 2015SM2016SM 2017SM 2018SM 2019
No AgrícolaQ2,171.75Q2,282.47Q2,394.40Q2,497.04Q2,643.21Q2,742.36Q2,742.36
AgrícolaQ2,171.75Q2,282.47Q2,394.40Q2,497.04Q2,643.21Q2,742.36Q2,742.36
Maquila y ExportaciónQ1,996.24Q2,095.10Q2,200.95Q2,284.15Q2,417.52Q2,508.15Q2,508.15
Elaboración propia con información de Acuerdos Gubernativos y datos del Mintrab y Usac.

A lo largo de estos años, aunque hubo incrementos en los salarios mínimos, estos no lograron mantener el ritmo con el aumento del costo de la CBA y la CA, lo que resultó en una disminución de la capacidad de compra de los trabajadores guatemaltecos a lo largo de la década. 

Este panorama comenzó a cambiar en 2020, cuando el gobierno de turno implementó incrementos diferenciados para los tres sectores laborales. Este enfoque buscó responder a las particularidades económicas de cada sector, aunque las disparidades salariales seguían siendo evidentes. 

Sector laboralSM 2020SM 2021SM 2022
No AgrícolaQ2825.10Q2,825.10Q2,959.24
AgrícolaQ2,742.37Q2,742.37Q2,872.55
Maquila y ExportaciónQ2,581.77Q2,581.77Q2,704.35
Elaboración propia con información de Acuerdos Gubernativos y datos del Mintrab y Usac.

Cambios significativos en 2023: circunscripciones económicas 

El año 2023 trajo un cambio importante en la forma de estructurar los salarios mínimos en Guatemala. Por primera vez, se establecieron dos circunscripciones económicas: 

  • Circunscripción Económica 1 (CE1): Incluye el departamento de Guatemala. 
  • Circunscripción Económica 2 (CE2): Comprende los demás departamentos del país. 

El ajuste salarial determinado para 2023 reflejó estas diferencias geográficas, con un aumento del 7% para los trabajadores en la CE1 y un 4% para la CE2. Este fue el incremento porcentual más alto registrado en la última década, destacando la intención del gobierno de abordar las desigualdades económicas entre las distintas regiones. 

Salario Mínimo Circunscripción Económica 1

Actividad LaboralSM 2023
No agrícolaQ3,166.38
AgrícolaQ3,073.60
Exportación y MaquilaQ2,893.54
Elaboración propia con información de Acuerdos Gubernativos y datos del Mintrab y Usac.

Salario Mínimo Circunscripción Económica 2

Actividad LaboralSM 2023
No agrícolaQ3,077.56
AgrícolaQ2,987.53
Exportación y MaquilaQ2,812.13
Elaboración propia con información de Acuerdos Gubernativos y datos del Mintrab y Usac.

Perspectivas y desafíos 

El salario mínimo para 2024, cuya vigencia está por finalizar —a menos que se disponga lo contrario respecto a un aumento del salario mínimo 2025—, experimentó un avance significativo, siendo uno de los incrementos con mayor porcentaje en la última década. Se estableció un aumento del 6.6 % para los trabajadores en actividades no agrícolas y de exportación, y del 6 % para los trabajadores del sector agrícola.

De esta forma, el salario mínimo quedó estipulado de la siguiente manera para el año 2024:

Salario Mínimo Circunscripción Económica 1

Actividad LaboralSM 2024
No agrícolaQ3,384.59
AgrícolaQ3,266.86
Exportación y MaquilaQ3,093.01
Elaboración propia con información de Mintrab.

Salario Mínimo Circunscripción Económica 2

Actividad LaboralSM 2024
No agrícolaQ3,227.82
AgrícolaQ3,124.42
Exportación y MaquilaQ2,921.90
Elaboración propia con información de Mintrab.
Reacciones de los guatemaltecos tras conocerse el salario mínimo para el año 2024.

Los retos a futuro en Guatemala en relación con los salarios mínimos y la economía son complejos y multifacéticos, requiriendo un enfoque integral que incluya ajustes salariales, desarrollo regional, mejora de condiciones laborales, educación y políticas públicas inclusivas. 

De acuerdo con el Boletín de Economía IIES-Usac, de enero 2024, los retos a futuro en relación con los salarios mínimos y la economía en Guatemala incluyen los siguientes 7 retos: 

  1.  Ajuste a la inflación: Uno de los principales desafíos es garantizar que los salarios mínimos se ajusten adecuadamente a la inflación. Actualmente, los salarios mínimos no logran cubrir el costo de la Canasta Básica Alimentaria (CBA) y la Canasta Básica (CA), lo que afecta la capacidad de compra de los trabajadores. Es crucial establecer mecanismos que permitan ajustes regulares y efectivos para que los salarios mantengan su poder adquisitivo. 
  2. Desigualdad regional: La disparidad económica entre las diferentes circunscripciones económicas (CE1 y CE2) plantea un reto significativo. Se debe encontrar un equilibrio que permita a las regiones menos desarrolladas mejorar sus condiciones económicas sin desincentivar la inversión en áreas más productivas. 
  3. Condiciones laborales: Mejorar las condiciones laborales en sectores informales y en aquellos donde los salarios son más bajos es un desafío. Muchos trabajadores aceptan salarios por debajo del mínimo establecido debido a la falta de oportunidades, lo que requiere políticas que fomenten la formalización del empleo y la mejora de las condiciones laborales. 
  4. Desarrollo Económico Sostenible: Fomentar un desarrollo económico que sea sostenible y que genere empleos de calidad es fundamental. Esto implica no solo aumentar los salarios, sino también mejorar la productividad y las condiciones de trabajo en todos los sectores, especialmente en la agricultura, que es un pilar importante de la economía guatemalteca. 
  5. Educación y capacitación: La falta de educación y capacitación adecuada limita las oportunidades de los trabajadores para acceder a empleos mejor remunerados. Invertir en educación y formación profesional es esencial para mejorar la calidad de la fuerza laboral y, por ende, la capacidad de negociación de los trabajadores en el mercado laboral. 
  6. Políticas públicas inclusivas: Es necesario implementar políticas públicas que aborden la pobreza y la exclusión social, garantizando que los salarios mínimos sean suficientes para cubrir las necesidades básicas de los trabajadores y sus familias. Esto incluye considerar factores culturales y geográficos en la fijación de salarios. 
  7. Reacción a cambios económicos globales: La economía guatemalteca también debe adaptarse a los cambios económicos globales, como la digitalización y la automatización, que pueden afectar el empleo y los salarios en diversos sectores. Preparar a la fuerza laboral para estos cambios es un reto importante. 

Claro, no se puede negar a ha habido avances, pero a pesar de estos, los trabajadores guatemaltecos continúan enfrentando desafíos significativos. Según expertos, los aumentos salariales, aunque representan un alivio, no logran cerrar la brecha con el costo de la canasta básica familiar, que sigue en ascenso debido a la inflación y otros factores económicos. 

En este contexto, es fundamental que las políticas salariales futuras no solo consideren los porcentajes de aumento, sino que también implementen estrategias integrales para mejorar el poder adquisitivo de los trabajadores y fomentar un desarrollo económico más equitativo.

A más tardar el 28 de diciembre, el presidente en funciones, Bernardo Arévalo, deberá anunciar el decreto presidencial que establecerá el salario mínimo aplicable en todo el territorio guatemalteco a partir del 1 de enero de 2025.

ESCRITO POR:

Glenda Burrión

Periodista de Prensa Libre especializada en economía con más de 7 años de experiencia como correctora de textos y creación de contenido digital.