Rincón de Petul
Opinadores: ojo con las traducciones
Más que montados sobre una ola de cambio, estamos haciendo usos no apropiados del idioma.
La “narrativa” de Trump sobre imponer “tarifas” durante su “administración” hizo que algunos evitaran “endorsar” su candidatura.
Es probable que lo que pretende ser el mensaje de estas líneas sea entendido por el lector en su cabalidad. Pero eso, más que un logro, puede terminar significando una tragedia idiomática a la que progresivamente estamos siendo sometidos en la contemporaneidad. No pretendemos aquí ser puritanos del lenguaje. Y sabemos que las palabras se transforman con el tiempo, con el uso y la evolución propia de las sociedades. Pero una cosa es ese proceso de cambio y otra, simplemente es el uso incorrecto de las palabras por no conocer su significado.
Si algún abogado landivariano contemporáneo lee esto, refrendará lo que aquí cuento. En los años 90 un día llegué a casa con una publicación que me entregaron en la facultad, que consistía en un directorio telefónico de los estudiantes de la carrera. Mi papá, hombre lector, lo vio y se rio. Me cuestionó sobre el nombre impreso en la portada. Galantemente, se titulaba “Efemérides”. Aparentemente, alguien, en algún momento, por alguna razón, decidió llamarle así a un directorio telefónico. Yo, joven y orgulloso, traté de defenderlo. Tal vez, le dije, es así como nacen nuevos usos para las palabras. Pero hablaba más desde el orgullo que desde la razón. Obviamente, el vocablo, en el idioma, significa enteramente otra cosa.
Algo similar sucede ahora con molesta frecuencia, especialmente en el contexto del análisis de la política estadounidense. La reciente elección en aquel país, alimentó algo incómodo que he notado hace algún tiempo. Como sociedad, normalizamos el uso incorrecto de palabras que, aunque en español sí existen, su palabra parecida en inglés tiene significado totalmente distinto. Aquí lo ilustro, con algunas que he notado, usadas incluso por escritores y comunicadores de respeto.
La “narrativa”. Seguramente, esta palabra se está traduciendo incorrectamente del término similar en inglés. Suenan parecido, pero sus significados no son los mismos. Cuando en aquel idioma hablan sobre política y dicen, por ejemplo, “the narrative of this election”, a lo que se refieren es a la retórica de la elección. Al discurso sobre el que están basadas las ideas. La narrativa, en español, nos lleva más hacia la narración de los eventos, como género o estilo literario.
Los idiomas evolucionan y con el tiempo vemos cómo nuevas incorporaciones llegan al diccionario.
Las “tarifas”. Otro que está teniendo auge, es el que intenta traducir el muy de moda: “tariffs”. Su similitud con el término español de “tarifas” no quiere decir que signifiquen lo mismo. A lo que se refiere Trump, cuando amenaza con estas, es a aranceles. Y no hay necesidad de buscar vuelta a esto. En español existe un vocablo preciso para dicha imposición tributaria.
“Administración”. En inglés, usan el término para referirse a una gestión de gobierno. El diccionario español ya reconoce este como un localismo, pero suena incómodo su insistente uso, en especial cuando hay alternativas que pueden sonar menos pretenciosas. Allá pueden decir “during the Obama administration”. Aquí podemos decir: período, gestión, mandato o presidencia.
“Endorsar”. Sucede que en inglés, dicen “endorse” cuando se refieren a respaldar una candidatura. Pero para traducir “vicepresident Pence did not endorse Donald Trump”, no puede usarse “endosar” ni “endorsar”, que en español significan una acción distinta. “Apoyar” o “respaldar” son buenas alternativas.
Los idiomas evolucionan y con el tiempo vemos cómo nuevas incorporaciones llegan al diccionario. Pero es valioso cuidarnos de que, más que estar montados sobre una ola de cambio, inadvertidamente, estemos haciendo usos inapropiados del idioma. Mire cómo la misma frase del principio, bien puede leerse así: El discurso de Trump sobre imponer aranceles durante su presidencia, hizo que algunos evitaran respaldar su candidatura.