La breve ceremonia se realizó en medio de un importante operativo policial, pocas horas después de la llegada del cuerpo de la joven desde Singapur, donde había sido trasladada de urgencia el jueves ya en estado crítico por sus lesiones internas y cerebrales.
El primer ministro india, Manmohan Singh, y la presidenta del gobernante Partido del Congreso, Sonia Ganghi, estaban en el aeropuerto de Nueva Delhi para recibir el féretro y ofrecer sus condolencias a los familiares.
Una vecina de la familia, que se identificó como Meena Rai, dijo a la AFP que había decidido participar de los funerales porque “realmente amaba a esta muchacha. Era la más brillante de todas las muchachas de nuestro barrio”.
Al mismo tiempo miles de personas participaron en varios puntos de Nueva Delhi en improvisadas vigilias y ceremonias y encendieron velas en homenaje a la muchacha a quien el país ahora simplemente llama “hija de la India”. También se registraron manifestaciones en Calcuta, Bombay e Hyderabad.
La estudiante murió el sábado en el hospital Mount Elizabeth en Singapur, donde fue trasladada en estado grave el jueves después de tres operaciones.
El pasado 16 de diciembre, a la salida de un cine, la joven había tomado un autobús junto a su novio, pero en el vehículo ambos se encontraron con seis hombres en estado de ebriedad, que la violaron y la agredieron sexualmente con una barra de hierro antes de arrojarla del vehículo en movimiento.
“Habían hecho todos los preparativos para su boda y planeaban una fiesta de boda en Nueva Delhi”, relató Meena Rai, que había acompañado a su amiga a escoger su vestido. Otra vecina, Usha Rai, dijo que la pareja quería casarse en febrero próximo.
Los familiares de la víctima rindieron homenaje al valor y a la determinación de la joven, que según ellos supo honrar el sacrificio de sus padres que vendieron una parcela de tierra en el Estado de Uttar Pradesh para financiar sus estudios. Las violaciones y las violaciones colectivas, que a menudo quedan impunes, son comunes en India, donde casi el 90% de las 256.329 víctimas de los crímenes violentos registrados en 2011 son mujeres, según cifras oficiales.
Sin embargo, la naturaleza especialmente salvaje de este ataque levantó la ira de la población y en Nueva Delhi hubo manifestaciones que dejaron al menos un muerto. Respondiendo al llamamiento a la calma del Gobierno, miles de personas se reunieron en la noche del sábado en Nueva Delhi para participar en vigilias.
“Este no es el primero ni el último caso de violación colectiva, pero está claro que no toleraremos más los crímenes sexuales”, dijo Rana Bela, una abogada que vino a expresar su solidaridad en una gran plaza en la capital. Algunos manifestantes fueron arrestados después de que estallaran enfrentamientos marginales con la policía.
“¿Qué hará exactamente el Gobierno para hacer que el país sea más seguro para todas las mujeres? ¿Y qué haremos cada uno de nosotros para luchar contra los prejuicios y la misoginia que están profundamente arraigados en nuestra sociedad?”, se preguntaba este domingo el Sunday Times de India en un editorial. El Ejecutivo de Manmohan Singh prometió mayor seguridad para las mujeres y penas más severas para los delitos sexuales.
Las fotografías, los nombres y las direcciones de los violadores convictos ahora se publicarán en los páginas web del Gobierno federal. La medida se aplicará primero en Nueva Delhi, conocida como “capital de las violaciones”. Según los medios de comunicación indios, hubo veinte violaciones en Nueva Delhi desde el 16 de diciembre, y una mujer fue violada y asesinada por varios hombres en Bengala occidental (este del país).