Salud y Familia
¿Qué hacer cuando hay poca agua en casa? Siga estos consejos
Consejos para sobrevivir usando poca agua y para contribuir a preservar este recurso que enfrentamos el riesgo de perder por su uso excesivo y contaminación.
Acciones simples como cerrar llaves, reparar fugas y recolectar agua de lluvia ayudan a conservar el agua. (Foto Prensa Libre: Shutterstock)
¿Alguna vez ha pensado en qué pasaría si el planeta se quedara sin agua? Este recurso se utiliza en todos los aspectos de nuestra vida, desde la higiene personal hasta la producción de productos esenciales como los alimentos.
En una entrevista para Prensa Libre publicada en 2019, el biólogo experto en manejo de recursos naturales Luis Ríos afirmó que, pese a lo que muchos creen, este recurso es finito, y el ciclo hidrológico se está degenerando “porque no le estamos dando tiempo de que se rellenen los mantos acuíferos; cada vez hay más pavimento, más construcciones y se evita la filtración de agua”.
Debido a esto, es necesario tomar conciencia sobre la escasez del agua, ya que cada vez es más difícil acceder a este recurso con la calidad suficiente para el consumo humano.
Son muchas las acciones que se realizan para sensibilizar sobre el buen uso de este recurso. Cada año, el 22 de marzo, por ejemplo, se conmemora el Día Mundial del Agua.
Además, el sexto objetivo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) enfatiza que cada vez más países experimentan estrés hídrico. El aumento de las sequías y la desertificación también está empeorando.
Según este informe, para 2050 al menos una de cada cuatro personas se verá afectada por escasez recurrente de agua.
La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) presenta cada año el Informe Mundial sobre el Desarrollo de los Recursos Hídricos. En el de 2023, el informe reconoce que la escasez hídrica se está haciendo endémica como consecuencia del impacto local del estrés hídrico físico, sumado a la aceleración y difusión de la contaminación del agua dulce.
Audrey Azoulay, directora general de la UNESCO, mencionó al presentar el informe de 2021 que “el agua es nuestro recurso más preciado, un "oro azul" al que más de 2 mil millones de personas no tienen acceso. No solo es esencial para la supervivencia, sino que también desempeña un papel sanitario, social y cultural en el seno de las sociedades humanas”.
884 millones de personas en el mundo no tienen acceso a agua potable.
ONU-HABITAT
¿Cómo vivir con menos agua?
Existen acciones inmediatas que podemos tomar cuando el agua es limitada. La Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos recomienda las siguientes prácticas para aprender a vivir con menos agua:
1. En la cocina
- Utilice un recipiente con aguay use una esponja para lavar los trastos. Después, use otra agua para enjuagar los platos. Si es posible, utilice un recipiente grande para los platos más sucios y uno más pequeño para los utensilios o vasos.
- Método de enjuague en seco: Si los platos no están demasiado sucios, utilice un paño seco para quitar el exceso de grasa o restos de comida antes de lavarlos. Esto reducirá la cantidad de agua necesaria.
- Lavar en un solo ciclo: Para economizar agua en un lavavajillas, asegúrese de que esté completamente lleno antes de ponerlo a funcionar. Los lavavajillas modernos consumen menos agua que lavar los platos a mano.
2. Aseo del hogar
- Utilice escobas y trapeadores: En lugar de mojar el suelo con mucha agua, use un trapeador o un trapo húmedo, asegurándose de que no esté empapado.
- Recoja el polvo con un trapo seco: Evite el uso de detergentes líquidos o agua excesiva para limpiar el polvo. Use un trapo de microfibra, que recoge el polvo sin necesidad de agua.
- Limpie ventanas con poco líquido: Para limpiar cristales y espejos, utilice un trapo seco o ligeramente húmedo. Si necesita un limpiador, mezcle vinagre y agua en proporciones iguales o añada un poco de detergente suave.
- Prefiera aspiradoras o escobas para evitar mojar: Si es posible, utilice una aspiradora para eliminar el polvo de alfombras y tapetes, en lugar de lavarlos frecuentemente con agua. Para superficies duras, una escoba es una excelente opción para barrer sin mojar.
3. Higiene personal
- Use un recipiente o cubo para enjuagarse: Llene un balde o recipiente con agua para enjuagarse. Esta técnica le ayuda a ser consciente de la cantidad de agua que usa y evita el desperdicio. Además, permite reciclar el agua para utilizarla en el baño o para regar las plantas.
- Duchas rápidas cerrando el grifo: Limite el tiempo bajo el agua. Abra el grifo solo cuando realmente necesite mojarse o enjuagarse. Cierre el grifo mientras se enjabona y vuelva a abrirlo solo para enjuagarse. Puede tomar duchas cortas siguiendo una canción de cuatro minutos y terminar antes de que esta acabe.
4. En la preparación de alimentos
- Cocine al vapor: Cocinar al vapor utiliza menos agua que hervir. Puede usar una vaporera o una rejilla dentro de una olla para cocer al vapor.
- Use el agua de la cocción: En lugar de desechar el agua utilizada para hervir verduras o pasta, guárdela para hacer sopas, caldos o incluso para regar las plantas. Esta agua contiene nutrientes útiles.
- Cocine a fuego lento con tapas: Al preparar guisos o sopas, use tapas para evitar que el agua se evapore rápidamente. Esto permite cocinar con menos agua y mantener los sabores concentrados.
Agua potable: un recurso limitado
A pesar de que el agua cubre aproximadamente el 70% de la superficie terrestre, solo una pequeña fracción está disponible para el consumo humano. Esta limitada cantidad de agua dulce se distribuye de manera desigual en el planeta, lo que agrava los problemas relacionados con su escasez.
La disponibilidad de agua no solo depende de su cantidad, sino también de su distribución. Muchas regiones del mundo enfrentan sequías frecuentes o contaminación que impide el acceso al agua limpia. En otras, las demandas de agua superan la capacidad de los ecosistemas para renovarla. Según National Geographic, para 2025 hasta 1 mil 800 millones de personas podrían estar viviendo con escasez de agua, sin tener suficiente recurso para actividades esenciales de una vida saludable, como beber, cocinar y limpiar.
¿Por qué hay escasez de agua?
Las causas son múltiples, en su mayoría derivadas de actividades humanas. Entre las principales se encuentran:
El cambio climático
El aumento de la temperatura ha alterado los patrones de precipitación, haciendo que algunas áreas experimenten lluvias más intensas, mientras que otras sufran sequías más prolongadas. Estos cambios afectan directamente la disponibilidad de agua en muchas regiones.
Contaminación
La actividad industrial, la agricultura intensiva y el mal manejo de desechos urbanos contribuyen a la contaminación de fuentes de agua dulce. El vertido de productos químicos, plásticos y metales pesados en ríos y lagos deteriora la calidad del agua, haciéndola peligrosa para el consumo y costosa de purificar.
Sobreexplotación de fuentes hídricas
El aumento de la demanda de agua para la agricultura, la industria y el consumo humano ha llevado a la sobreexplotación de acuíferos y ríos. En algunas áreas, el ritmo de extracción supera la capacidad de renovación natural de los cuerpos de agua, lo que provoca un agotamiento progresivo de estas fuentes.
Crecimiento demográfico
A medida que la población mundial sigue creciendo, también lo hace la demanda de agua. Según ONU-Habitat, Estados Unidos es el país con mayor consumo de agua, con un promedio de 575 litros diarios por persona.
Desperdicio
En muchas partes del mundo, el agua se utiliza de manera ineficiente, lo que incrementa el riesgo de escasez. En áreas con infraestructuras deficientes, las pérdidas de agua por fugas y el mal mantenimiento de los sistemas de distribución son comunes. Además, el consumo excesivo en la vida cotidiana, sin conciencia sobre la cantidad utilizada, agrava el problema.
Pero ¿Cómo podemos ayudar?
7 consejos para preservar el agua
El cuidado del agua comienza con la conciencia individual sobre su importancia y el impacto de nuestras acciones diarias en su consumo. ¿Es realmente un exceso consumir 575 litros por persona al día, como ocurre en Estados Unidos? Por supuesto que sí. Por ello, existen acciones que podemos implementar en nuestros hogares para reducir nuestra huella hídrica.
1. Cerrar la llave cuando no se usa
Este hábito, aunque sencillo, es uno de los más efectivos para ahorrar agua. Por ejemplo, al lavarse las manos, cepillarse los dientes o lavar los platos, se debe evitar dejar la llave abierta.
2. Reparar fugas de agua
Las fugas, aunque pequeñas, pueden resultar en grandes pérdidas de agua a lo largo del tiempo. Un grifo que gotea o una tubería rota pueden desperdiciar miles de litros anualmente. Es fundamental revisar las instalaciones de plomería con regularidad y reparar cualquier fuga de inmediato para evitar desperdicios innecesarios.
3. Recoger agua de lluvia
La recolección de agua pluvial es una práctica antigua que puede ser muy útil para jardines, huertos y otras actividades que no requieren agua potable. En Guatemala, donde las lluvias son frecuentes en muchas regiones, instalar un sistema de captación de agua de lluvia en el hogar es una forma efectiva de aprovechar un recurso natural sin necesidad de consumir agua tratada.
4. Reciclar el agua
Una buena forma de combatir la escasez es la reutilización del agua. Por ejemplo, colocar una cubeta en la regadera mientras se baña permite recolectar agua. Lavar los alimentos en un recipiente también ayuda a evitar desperdicios innecesarios, y el agua recolectada puede reutilizarse para consumos no directos, como regar las plantas o descargar el inodoro.
5. Limitar el uso de mangueras
El uso excesivo de mangueras para regar jardines o lavar carros es una de las principales fuentes de desperdicio de agua en las viviendas. En su lugar, se pueden emplear sistemas de riego por goteo, que permiten una distribución más eficiente y controlada del agua. Asimismo, utilizar cubetas de agua en lugar de mangueras para lavar el carro reduce significativamente el consumo.
6. Promover la educación ambiental
La sensibilización y la educación sobre el uso responsable del agua son fundamentales para cambiar los hábitos a nivel colectivo. Las campañas de concienciación pública, los programas educativos en escuelas y las acciones comunitarias pueden ayudar a generar una mayor comprensión de la importancia del agua y cómo cada individuo puede contribuir a su conservación.
7. Usar aparatos de eficiencia hídrica
El uso de electrodomésticos y dispositivos de eficiencia hídrica, como duchas de bajo flujo, inodoros y electrodomésticos como lavadoras de bajo consumo, puede reducir significativamente el uso de agua en el hogar. Estos aparatos están diseñados para realizar las mismas tareas con una menor cantidad de agua.