El equipo, uno de los más populares de Brasil, regresó el martes por la madrugada y recorrió el centro de Sao Paulo en un autobús. También fue recibido por el alcalde Gilberto Kassab.
Miles de hinchas vestidos con los colores blanco y negro del equipo ondeaban banderas y bailaban en las calles para festejar el título que Corinthians conquistó el domingo al vencer 1-0 a Chelsea en la final.
“No tiene precio sentir la emoción de todos estos hinchas”, comentó el zaguero Fabio Santos a Globo TV.