Las dos selecciones prefieren el ataque y por tanto preludian un atractivo encuentro en Varsovia.
Un elemento que viene a darle más lustre a la semifinal es que los encuentros entre Italia y Alemania usualmente son memorables, e Italia siempre sale airosa.
La victoria de Italia por 4-3 en las semifinales del Mundial de 1970, en la capital de México, es todavía recordada como uno de los partidos mundialistas más formidables, y el triunfo italiano de 2-0 en tiempo extra hace seis años en Alemania también forma parte de la tradición de la Azzurra.
En el 2006, Italia estuvo también implicada en un escándalo por el arreglo de partidos muy parecido a los problemas con apuestas que ahora afectan a la selección. Derrotar a Alemania en el caldero que es el Westfalenstadion en Dortmund parecía una misión imposible.