Si me permite

El conocimiento deberá generar productividad

El conocimiento con amor genera auténtica convivencia la cual todos pueden disfrutar.

“Existen personas que están llenas de conocimiento, pero vacías de piedad y amor”.  Jonathan Edwards

Es muy frecuente que el conocimiento que adquirimos de niños está determinado por nuestros mayores, quienes nos van guiando en la primera etapa de nuestra vida, pensando en nuestro bienestar, pero cuando vamos creciendo la información que nuestro medio nos presenta puede ser diferente. Cuando vamos escogiendo qué estudiar y qué debemos aprender. esto moldea nuestro conocimiento.

Cuando empezamos a ampliar nuestros conocimientos entonces el entorno debería volverse amigable.

Es importante tener presente que todo conocimiento que adquirimos de alguna manera debe  ampliar la panorámica de la vida que tenemos, y de ese modo con mucha más facilidad podemos encontrar el lugar que habremos de ocupar y lo que habremos de hacer el resto de nuestra vida.

El conocimiento, cuando tiene la debida claridad de cómo se podrá usar y para qué cosas nos habrá de servir, genera beneficio que se manifiesta en el crecimiento de nuestra autoestima y valoración, porque fácilmente conocemos nuestras limitaciones y luego las capacidades que tenemos. El resultado inmediato de este logro es que nos empezamos a relacionar con personas que de alguna manera tienen afinidad con nosotros, y además buscamos relacionarnos con aquellos que nos ayudarán de algún modo para avanzar a las metas que nos hemos trazado.

Debemos tener presente que para poder incrementar nuestro conocimiento tenemos que echar mano de la comprensión como un recurso esencial, que es más que evidente en aquellos que preguntan o bien piden explicación de las cosas. Ellos tienen siempre la ventaja de poder ser los que habrán de avanzar en todo lo que se involucran y nunca estarán en simples rutinas, sino la innovación de sus actividades habrá de darle mayor sentido a la vida y los retos que el diario vivir presenta, serán desafíos que los llevaran a mejores relaciones con las personas que están en su entorno.

Probablemente las personas que conocemos y que son las más sociables y  siempre se relacionan con todo tipo de personas son aquellas que están en la búsqueda de tener nuevos conocimientos y no simplemente se conforman con la información que tienen, sino que van un paso adelante en usar el conocimiento adquirido, no para que sean vistas, sino para minimizar la dependencia en otros para ser ayudados, porque una vez que alcanzan algún conocimiento lo aplican en la vida diaria, y no solo para un beneficio propio, sino también para que el prójimo de ellas pueda tener el provecho necesario.

En estos días, cuando la tecnología nos presenta desafíos y facilidades, como nunca antes   hemos tenido, estamos desafiados a la actualización constante de estos recursos, los cuales de alguna manera funcional nos tendrán conectados con los que nos rodean y nuestra vida será mucho más productiva, y por lo mismo, mucho más gratificante también.

Por lo tanto, el reto está presente, y estamos desafiados en pensar cuál es el próximo campo en que debo introducirme para conocerlo, y de qué modo puedo adquirir más conocimiento para ser adecuadamente productivo, teniendo presente la edad y dónde me encuentro, así como los desafíos que el medio me presenta para que ocupe el lugar que me corresponde en una manera productiva, y esto no será lo mismo para todos, y debemos reconocerlo y, por supuesto, aceptarlo.

ESCRITO POR:

Samuel Berberián

Doctor en Religiones de la Newport University, California. Fundador del Instituto Federico Crowe. Presidente de Fundación Doulos. Fue decano de la Facultad de Teología de las universidades Mariano Gálvez y Panamericana.