Reflexión cultural

La riqueza de las ferias del libro en los departamentos de Guatemala

Las ferias del libro abren espacio de reflexión y crecimiento para la población guatemalteca.

Una imagen de la participación de jóvenes durante la Feria del libro de San Marcos. (Foto Prensa Libre: cortesía Fil San Marcos)

Una feria del libro evoluciona. Por lo regular trata de espacios dinámicos, actividades y diversidad de opciones para pasar horas o días con diversidad de temáticas, reflexiones y en ocasiones con la oportunidad de conocer a los autores o especialistas que nos acercan a otras miradas.

Actualmente podemos reconocer al espacio de las ferias con estrategias diferenciadas y con una organización promotora que actúa desde sus propias motivaciones, desde ahí se generan ferias del libro: industria cultural propuestas al ser un interlocutor de varias voces. En estas el libro es el corazón, es el motor, pero su organización y estructura va más allá del mero acercamiento al lector; no es solo la venta, sino la complejidad cultural de los contenidos y de los actores, quienes lo rodean y han hecho de este un espacio que permite la construcción de procesos basados en el libro, en la vinculación de actores y de sectores profesionales, una explicación que plantean Sofía de la Mora Campos y Zyanya Patricia Ruiz Chapoy, en una investigación del Departamento de Educación y Comunicación de la Universidad Autónoma Metropolitana, UAM-Xochimilco.

"Es una festividad que permite dignificar la necesidad del conocimiento y del placer, una convocatoria colectiva, un movimiento social, económico, político y, por supuesto, cultural", agregan las conocedoras.

En Guatemala existen algunas ferias del libro que se desarrollan durante el año en diferentes lugares. En la ciudad capital está la Feria Internacional del Libro en Guatemala, Filgua, que en la última edición llegó a casi 80 mil personas, en dos semanas intensas de actividades.

Las ferias también se desarrollan otros espacios como en Quetzaltenango, Antigua Guatemala, Mazatenango y San Marcos. El tener más ferias y espacios en los departamentos de Guatemala es una necesidad.

Diana López de Sánchez, presidenta de la Asociación Gremial de Editores de Guatemala (AGEG), explica que ellos desde Filgua han planteado de llevar esta experiencias a más lugares.

Por ahora, López comenta que se reciben algunos fondos del Estado para Filgua y siempre se pedía un incremento para hacer más grande la feria, "quisiéramos que Filgua llegara a otros departamentos y a razón de esto en 2022, la Comisión de Cultura y de Finanzas del Congreso de la República aumentó el aporte estatal a Q2 millones para que se realizaran dos ferias más", recuerda. Se decidió hacerlo por ahora en Retalhuleu y Chiquimula porque son departamentos que no tenían ferias y para no competir con otros sitios que ya desarrollan esta dinámica.

"La idea es llegar a lugares donde los guatemaltecos no tienen acceso a libros o actividades como estas", dice López. El proyecto se llama Libre al viento.

En el caso de Retalhuleu existe un grupo gestor interesado en el desarrollo de la cultura local y han dado el acompañamiento para que se desarrolle y Chiquimula será la más próxima en abrir este espacio durante la última semana de septiembre.

Los acuerdos

Parte de la dinámica entre los organizadores de ferias del libro en el país es mantenerse conectados durante el año. Esto con la finalidad de conocer las fechas próximas para desarrollar ferias y así no coincidir y que las diferentes editoriales lleven la mejor selección a cada lugar.

"Una feria del libro no es solo una fiesta cultural poque tienen un mensaje sutil donde se promueve la democracia y es una manera de reconoer que se se respeta la libertad de expresión y pensamiento", agrega López.

López también insiste en que la creación de una feria del libro invita a las comunidades a estar involucrados y desarrollar los proyectos, así como a buscar los recursos estatales que puedan promover la creación de estos espacios.

Rodolfo Luis López, gestor cultural, artista plástico, escritor y editor comparte que ellos en San Marcos comenzaron la inquietud con un grupo de amigos involucrados en temas culturales. "Hablamos una feria del libro antes de la pandemia y debido a eso no logramos armarlo hasta el 2023", dice el gestor cultural.

En 2024 se hizo la segunda edición. "El desarrollo de la feria es una responsabilidad social, de mi lado no tiene un beneficio economico y uno de los grandes momentos es que favorece el conocer y descubrir nuevos valores en la literatura", agrega Luis López.


En agenda

Una de las próximas actividades será la Feria Libro al Viento en Chiquimula. La actividad se realizará del 26 al 29 de septiembre con más de 60 actividades culturales y artísticas, presentaciones de libros, y talleres. También se contará con un espacio para exposición y venta de libros. Se contará con la participación de autores y personalidades de la región como Brenda Solis-Fong, Chrised Morales, Gustavo Bracamonte, Mirciny Moliviatis, Denise Phé-Funchal, Maya Cú, por mencionar algunos nombres.

Dentro a la agenda cultural destaca la conferencia de José Luis Perdomo Orellana, Premio Nacional de Literatura 2020, que realizará en el marco de la celebración del año de Miguel Ángel Asturias, el jueves a las 18 horas.

El horario del jueves 26 al sábado 28 de será de 9 a 19 horas, y el domingo 29, de 9 a 15 horas. El punto de encuentro de La Feria será el emblemático Instituto Normal para Señoritas de Oriente INSO (4ª. Calle 6-00, zona 1 de Chiquimula) una entidad educativa con 137 años de historia en la región del Oriente.

ESCRITO POR:

Ingrid Reyes

Periodista de Prensa Libre especializada en periodismo de bienestar y cultura, con 18 años de experiencia. Premio Periodista Cultural 2023 por el Seminario de Cultura Mexicana y premio ESET región centroamericana al Periodismo en Seguridad Informática 2021.

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