CULTURA

Por qué es importante discutir sobre los contratos de edición antes de publicar un libro en Guatemala

Los contratos de edición sirven para proteger los derechos de autor y fortalecer la confianza en la creciente industria editorial del país.

Por qué es importante discutir sobre los contratos de edición en libros de Guatemala

Los contratos de edición para garantizar los derechos de todas las partes que provocan una obra literaria. (Foto Prensa Libre: Shutterstock)

Quienes deseen publicar un libro en Guatemala tienen tres opciones. La primera de estas considera el pulso del escritor que no se inclina a trabajar con una plataforma editorial. Esta modalidad se entiende como la autopublicación, que a pesar de la libertad que ofrece al creador, le obliga asumir el proceso de monetización y edición de la obra completamente a él.

Las otras formas consideran que las obras literarias sean publicadas a través de editoriales y/o sellos editoriales que pertenezcan (o no) a la Asociación Gremial de Editores de Guatemala, así como al Registro de Personas Jurídicas.

Algo que resulta necesario en cualquiera de los tres escenarios es el hecho que el autor esté dispuesto a inscribir su obra en el dominio ISBN (International Standard Book Number, por sus siglas en inglés). Esto procura que la pieza sea registrada e identificada como una obra exclusiva. En Guatemala esto lo regula la Agencia Guatemalteca ISBN, que es mediada por la Gremial de Editores.

El ISBN también faculta que los autores puedan imprimir sus obras con empresas litográficas sin necesidad de un proceso editorial. Según anota Max Araujo, abogado experto en derecho cultural e investigador, las imprentas son valiosas, ya que desde años han impulsado el trabajo de los escritores emergentes.

“El autor puede contratar la imprenta y desde ahí la Ley de Derecho de Autor y Derechos Conexos de Guatemala protege su obra. Por esto es importante el contrato de edición”, argumenta Araujo.  

María Ordóñez, editor y jefe de Independiente Editorial Digital señala que los contratos son necesarios ya que, al enviar una obra a cualquier imprenta, los autores pueden tener un respaldo de la cantidad de publicaciones existentes.

Luego de pasar por imprenta, los materiales deben contar en el colofón cuántas publicaciones se realizaron. Esto lo respalda la tenencia del ISBN, así como un contrato de edición que también se realiza con las imprentas.

¿En qué consiste este tipo de contrato? Según el Artículo 84 de la mencionada Ley, se establece que todo titular del derecho de autor de una obra literaria, científica o artística, o sus derechohabientes, “concede en condiciones determinadas, a una persona llamada editor, el derecho de reproducir su obra y vender los ejemplares, a cambio de una retribución”. Esto, en el caso de las editoriales.

Araujo señala que los contratos de edición regulan los compromisos adquiridos por el autor y editor. Por ejemplo, estos pueden incluir los plazos de trabajo, el monto a convenir por la obra, las regiones donde se va a imprimir, el número de ejemplares, el idioma, entre otras características.

Araujo destaca que para publicar una obra en Guatemala a través de una editorial existen dos formas de contrato. La primera ocurre en el momento que la empresa editora recibe una obra y asume enteramente la producción y edición del libro.

El investigador entrevistado agrega que es relevante hablar de los contratos de edición, ya que la industria editorial se refuerza en el país: “Antes había unas cuantas editoriales. Ahora, por ejemplo, en la Feria Internacional del Libro, cada vez nuevos editores presentan libros. Todas las editoriales o sellos deberían tener un modelo legal para tener certezas en dado caso se lleve a cabo un incumplimiento”.

Entre los incumplimientos más comunes que afectan a los autores se distinguen: publicaciones realizadas sin consentimiento público de los creadores, las reproducciones ilícitas de obras, la falta de pagos por un material acordado, las traducciones no aprobadas, entre otros, apunta Araujo.

Desafíos en los contratos

Frente a un creciente panorama editorial en el país, resulta valioso pensar el rol de los contratos de edición para garantizar los derechos de todas las partes que provocan una obra literaria.

“Le tenemos miedo al compromiso escrito y pensamos que esto de alguna manera es como una expresión de desconfianza”, señala Raúl Figueroa Sarti, director de F&G Editores, quien además sostiene que muchas veces los contratos no son considerados por el desconocimiento mismo de las leyes.

Figueroa Sarti argumenta que los contratos de edición establecen con claridad cuáles son las garantías, las obligaciones y los derechos de cada una de las partes. No obstante, señala que todo debe basarse en la confianza: “Entre editor y autor debe haber confianza siempre. Si no la hay, ningún contrato escrito con mil testigos te va a servir”.

A decir del director de F& Editores, hablar de este tema es relevante considerando que estamos en un país donde la industria editorial se está desarrollando y que ha mejorado en los últimos 20 años. Figueroa Sarti añade que antes de los 2000, estos temas no se discutían tanto, ya que las editoriales eran menos.

Por qué es importante discutir sobre los contratos de edición en libros
Algo que resulta necesario en cualquier formato de edición es el hecho que el autor esté dispuesto a inscribir su obra en el dominio ISBN. (Foto Prensa Libre: Shutterstock)

Y es que en medida que el panorama va creciendo, también lo hacen los formatos de editoriales. Una de las más novedosas en ese sentido es Independiente Editorial Digital, una plataforma que nació en 2015 y que actualmente publica libros nacionales tanto en versión impresa como digital.

María Ordóñez, su encargada, señala que muchos escritores con los que ha trabajado desde esta iniciativa llegan con desconocimiento sobre el proceso editorial y los contratos que este implica. “El conocimiento de los autores sobre los contratos es bastante limitado. Muchos piensan que solo necesitan llevar su libro y ya será publicado”, afirma.

Para enfrentar esta situación, la editorial ha implementado cursos para autores, en los cuales se les enseña desde cómo presentar un manuscrito hasta temas clave como los derechos de autor.

“Entre editor y autor debe haber confianza siempre. Si no la hay, ningún contrato escrito con mil testigos te va a servir”.

-Raúl Figueroa Sarti, director de F&G Editores

“Ahora, los autores envían sus manuscritos con un respaldo más formal”, comenta. Además, Independiente Editorial Digital se encarga de enviar una carta de confirmación al recibir cada manuscrito, lo que asegura una relación más transparente desde el principio del proceso.

Ordóñez resalta que los contratos de edición son clave para proteger tanto al autor como a la editorial o imprenta, ya que formalizan el reconocimiento y protección de la obra. Aunque el autor no ceda sus derechos, la editorial puede gestionarlos si existe un acuerdo, garantizando la propiedad del creador mientras la editorial se ocupa de la distribución.

Finalmente, Ordóñez aconseja a los autores revisar los contratos con un abogado y registrar sus obras con ISBN para garantizar su protección legal. "Lo que no está por escrito, no existe", enfatiza la experta, destacando la importancia de respaldar todo con documentos claros y una página de créditos que reconozca al creador.

ESCRITO POR:

Alejandro Ortiz

Periodista de Prensa Libre especializado en temas sobre cultura y bienestar, con 5 años de experiencia.