Conciencia

Hacia un sistema educativo dinámico e innovador

“Guatemala puede superar la pobreza si apuesta por una reforma educativa que impulse el talento y aproveche la tecnología”.

En la “Cumbre de Innovación del Volcán 2024” que se celebra actualmente en Antigua Guatemala, la conferencista experta en pedagogía y tecnología, Shirley Winner, destacó la urgencia de revolucionar los sistemas educativos para que los países logren la prosperidad.


Aunque la pandemia de covid-19 creó expectativas de una transformación educativa, el retorno a las aulas mostró que los cambios fueron mínimos. En Guatemala, la brecha de aprendizaje se amplió considerablemente, especialmente en el sector público, debido a la falta de un plan integral. El conocimiento humano se duplica cada año, la tecnología avanza exponencialmente y el auge de la inteligencia artificial es un hecho, lo cual debe motivarnos a realizar cambios profundos para el progreso.


Con Shirley conversamos sobre la situación de Guatemala, y concluimos que el sistema educativo debe ser totalmente diferente. Los profesores seguirán siendo esenciales, pero deben asumir nuevos roles como mentores y facilitadores, en lugar de tan solo transmitir su conocimiento. Es crucial establecer una “institución para profesores del siglo XXI” con el apoyo de expertos internacionales para crear programas de formación y capacitación que inspiren a los educadores a liderar el cambio con coraje, alegría y sabiduría. Deseamos profesores capaces, que les encante enseñar.

¡Llegó el momento de hacer una transformación educativa!


La educación personalizada será el nuevo paradigma. Cada estudiante debe recibir atención individualizada, enfocándose en descubrir y potenciar sus habilidades y talentos. Soñar y lograr sus aspiraciones. Los mentores deben guiar a los alumnos en la selección de lecturas, entrenamientos y metas, fomentando la pasión, creatividad y curiosidad. El método Montessori, que organiza a los niños en ciclos de tres años y promueve el descubrimiento autónomo, es un excelente modelo para seguir. Logra estudiantes curiosos, creativos y apasionados. Seremos aprendices de vida.


La experta Winner compartió un ejemplo: su hijo aprendió a leer y escribir a los 5 años y compartía clases con niños de hasta 7 años. Este tipo de experiencia sugiere que se deben definir mínimos esenciales en conocimientos básicos como lenguaje y matemáticas para los primeros años (párvulos y preparatoria). La primaria debería cambiar radicalmente. Se requiere un sistema que permita definir y resolver problemas, con una evaluación centrada en el desarrollo de competencias en lugar de en la memorización de contenido. Muchas materias se aprenderán por medio de proyectos. El arte y la música son claves para el desarrollo de la creatividad. Es crucial proporcionar acceso a herramientas tecnológicas, utilizar las mejores plataformas educativas y el internet, fomentando el trabajo en equipo para desarrollar habilidades sociales. La innovación debe estar siempre presente.


La secundaria, por su parte, debe enfocarse en habilidades prácticas más que en materias académicas tradicionales. La conexión entre la escuela y el mundo laboral debe ser estrecha, con un enfoque en las competencias y habilidades necesarias para los trabajos del futuro y lograr que las instituciones educativas interactúen con las empresas, como en muchos países desarrollados.


El sistema educativo en Guatemala está obsoleto y enfrenta un colapso. A pesar de que los pactos colectivos han mejorado los ingresos de los maestros y el personal del ministerio, tanto los aumentos como los bonos no están relacionados al aprendizaje de los alumnos —los incentivos de los profesores no están alineados a los resultados en el aula. Es urgente una reforma educativa integral para garantizar una educación de calidad y preparar a la niñez y juventud para un futuro complejo y tecnológico.

ESCRITO POR:

María del Carmen Aceña

Ingeniera en Sistemas, con maestría en Administración de Empresas de INCAE. Vicepresidente del Centro de Investigaciones Económicas (Cien). Exministra de Educación. Amante de la vida y de Guatemala