El experto indicó que todos los meses conocen casos de ese tipo, y en varios de ellos las manos del agresor quedan marcadas en la espalda del menor e incluso se puede observar la silueta completa de la hebilla del cinturón con que los han golpeado.
Rodas Muñoz refirió que localizan patrones de agresión tanto en niños vivos como en los que han muerto como consecuencia de la violencia física.
“Lo más común que dicen los padres es que el niño se cayó, pero al revisarlo lleva marcada una mano en los glúteos, en la espalda, en las piernas o en el rostro. Golpes que también son causados con un palo o un tubo”, agregó.
Añadió que en algunas ocasiones se observan lesiones leves, como raspones, pero al verificar se determina que las víctimas fueron empujadas con la intención de causarles heridas.
Síndrome
Un porcentaje de defunciones de menores de 1 año corresponde a lo que en medicina forense se conoce como síndrome de niño sacudido. Rodas Muñoz explicó que esas situaciones se dan cuando los padres sujetan al bebé por la cintura y lo sacuden violentamente, lo que les causa la muerte por lesiones en el cuello.
Casos extremos
El entrevistado aseguró que siguen descubriendo quemaduras de cigarro en menores, y esas lesiones comúnmente las observan en muslos y glúteos de la víctima. La fuente también expuso que en la zona 18 conocieron el caso de un menor de 12 años a quien su padrastro amarraba a la cama y lo aislaba en un cuarto. Además, no le daba de comer, y cuando fue examinado presentaba un cuadro de desnutrición.
Esa situación prevalece sobre todo en menores de 4 a 7 años, por no tener fuerza suficiente para defenderse, explicó el experto.
Otro hecho similar se dio con la muerte de un niño cuyos padres aseguraban que nunca lo habían agredido y argumentaban que los golpes que presentaba eran consecuencia de las caídas que tenía el pequeño cuando jugaba, pero los forenses determinaron científicamente que había sido lanzado a una piscina sin agua.
Patrones
Rodas Muñoz expresó que las agresiones contra los infantes no precisamente se cometen con un solo objeto.
“Muchas mamás arañan a los niños y les desgarran la piel. Estos daños son muy específicos, porque las lesiones son evidentes y marcan patrones, porque no lo hacen solo una vez”, enfatizó, al referirse a ese tipo de agresiones físicas.
CASOS DE IMPACTO SOCIAL
Niños de distintas edades víctimas de todo tipo de agresiones han sido protegidos por el Estado.
Menor testigo
El 29 de septiembre del 2012, en una cueva del barranco que colinda con El Cerrito, zona 7, un niño de 7 años presenció cuando su madre fue abusada por su padrastro, Gilberto Pérez Guzmán, quien ya no convivía con la víctima. El presunto agresor fue capturado y llevado a proceso.
Padre agresor
Seis hermanos que eran maltratados por su padre fueron rescatados en un operativo en la colonia Vista Hermosa, zona 6, Huehuetenango.
Los menores de 9 a 16 años fueron golpeados con un cable por Abraham Tomás Lucas, 40.
Murió a golpes
Jeniffer Alejandra Vásquez Alquijay, de 3 años, murió en septiembre del 2012, como consecuencia de las heridas que le causó su madre, Liliana Alquijay. En el informe forense se determinó que la menor tenía golpes, mordidas y cicatrices en el cuerpo.
Comió insecto
Una niña de 6 años fue rescatada por la Procuraduría General de la Nación cuando circuló un video en el que supuestamente es obligada a comer una cucaracha. La madre de la menor reconoció que su hija era la que aparecía en la grabación, pero luego lo negó.
Hermanos maltratados
Gia Karlotta Barrios, de 13 años, murió a manos de su padre, Édgar Aroldo Barrios Fuentes, alias el Diablo, condenado a 190 años de prisión. La adolescente y sus tres hermanos menores sufrieron abusos físicos y psicológicos durante años.
Experto recomienda
Leonel Dubón, psicólogo experto en temas de niñez y adolescencia, expuso técnicas de dibujo para identificar a un menor víctima de agresión.
El dibujo de una silueta humana demasiado grande refleja agresiones hacia el menor.
Los trazos largos remarcados del dibujo pueden significar que la familia lo controla demasiado.
Las piernas demasiado largas de una figura humana también pueden demostrar desórdenes emocionales en la víctima.
Una figura humana sin manos significa agresión física.
Los dibujos de órganos genitales en la figura significan abuso sexual.
El menor víctima de violencia tiene cambios drásticos en la conducta y se aísla.
Una pregunta directa para saber si el niño es víctima de abuso sexual o agresión física no funciona, y debe hacerse con cautela.
La Procuraduría de Derechos Humanos recomienda denunciar casos de maltrato infantil al número 1555.
332 casos por lesiones recibió el Inacif en enero pasado.
258 niñas fueron posibles víctimas de maltrato.
