“El objetivo de esta casa en enseñar a los jóvenes lo que los libros de historia no han enseñado”, señalo durante una presentación a los periodistas, Fabiola García, coordinadora de comunicación de Caldh.
Bajo el lema “para no olvidar”, la casa de la memoria será un centro destinado principalmente para la reflexión de la juventud.
“Este es un espacio para que los jóvenes conozcan la historia de la lucha y la resistencia para que este país sea diferente”, dijo a Francisco Soto, director de Caldh.
Los visitantes podrán conocer desde la civilización maya, pasando por la conquista de los españoles, las revoluciones y dictaduras, hasta el conflicto armado que dejó más de 200 mil en Guatemala entre 1960-1996.
Dijo que así como otros países tienen sus museos, Alemania uno sobre el holocausto, Caldh ideó esta casa “como un ambiente de reflexión para que los abusos del pasado no vuelvan a repetirse”.
“De vez en cuando camino al revés, es mi modo de recordar. Si caminara solo hacia adelante te podría contar cómo es el olvido”, dice un texto en el ingreso principal del inmueble y que forma parte de un poema del escritor guatemalteco, Humberto Akabal.
García explicó que unas veinte personas serán capacitados por especialistas para servir de guías a los visitantes que acudan a este museo.
Añadió que se prevé que durante las próximas tres semanas visiten el lugar alumnos de centros educativos públicos y privados.
El ingreso a la casa de la memoria será gratuito y a los visitantes se les entregará un paquete pedagógico con toda la información que se exhibe en Kaji Tulam.
El museo se ubica en la zona 1, de la ciudad de Guatemala.
