Expertos independientes le dan a los demócratas pocas posibilidades de retomar el control del proceso, lo que implica que los republicanos seguirán bloqueando la agenda del presidente de EE. UU., Barack Obama, en su segundo término.
El primer paso fue ganar determinadas legislaturas estatales para poder controlar el proceso. Cada 10 años, luego del censo nacional, los estados reconfiguran los 435 distritos de la Cámara de Representantes tomando en cuenta los cambios de la población.
Los estados más poblados tienen más representantes. Algunos estados ganan bancas, otros las pierden.
Los éxitos recientes de los republicanos son de contornos históricos: en el 2012 consiguieron una mayoría de 33 bancas en la Cámara de Representantes a pesar de que sus candidatos sacaron 1.4 millones de votos menos que los demócratas.