No obstante, la sonrisa de los pobladores se borra cuando se les pregunta sobre la cantidad de muertes por violencia ocurridas en el municipio. Sin dejar de ser cordiales responden que no les gusta hablar de eso, “porque no es sano”.
Evaden el tema. No se sabe si por temor o simplemente no les importa.
“No sabemos de dónde sale tanta muerte. Por temporadas hay extorsiones, asaltos, secuestros y asesinatos”, reconoció García.
El pueblo da la impresión de que no es violento. Se percibe pobreza, por la cantidad de viviendas de adobe con techos de lámina y las pocas calles pavimentadas o empedradas, aunque también hay viviendas de bloc y de dos pisos.
Base económica
Según el plan de desarrollo de la Secretaría de Planificación y Programación de la Presidencia (Segeplán) del 2010, el 71 por ciento de la población de Pueblo Nuevo Viñas vive en la pobreza, y el 23 por ciento, en extrema pobreza.
Su principal fuente de ingresos es la agricultura, ya que el 67 por ciento de la población económicamente activa se dedica al cultivo de café y de granos básicos.
Al recorrer el pueblo se ve que hay desempleo. Grupos de jóvenes, en especial hombres, se ven reunidos en las calles, sin más oficio que conversar, lo cual evidencia que no solo no tienen trabajo, sino que tampoco estudian, y las autoridades no construyen centros culturales o deportivos para ellos.
Quienes concluyen el diversificado deben ir a Barberena o Cuilapa para continuar estudios universitarios.
Posibles respuestas
El líder comunitario Víctor Morales Juárez no quiso entrar en detalles y solo comentó que la violencia es una herencia del conflicto armado interno, pues en ese lugar se organizaron frentes guerrilleros y funcionó un destacamento militar. “Por eso, ahora, por cualquier cosa, salen a relucir las armas”, señaló.
Para el pastor evangélico Héctor Roldán, el problema no es local, sino mundial. “No hay temor de Dios. Son las señales de los últimos días”, sentenció.
El alcalde de esa localidad, Romualdo Yumán, señaló que la violencia se debe a que solo han contado con el apoyo de nueve agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) y un autopatrulla, el cual se debe abastecer de combustible en Cuilapa.
El jefe de la Comisaría de Cuilapa, Benito García Sandoval, señaló que los crímenes no son nada nuevo en Pueblo Nuevo Viñas, y son causados por los mismos pobladores.
Respecto de las muertes, Juan José García expresó: “No se sabe si es por problemas políticos, venganzas personales o líos de tierras. Eso es trabajo del Ministerio Público”.
Oswaldo Guzmán, delegado de Segeplán, considera el vacío de poder local causa o empeora la situación, pues la Municipalidad ha estado acéfala por mucho tiempo.
Recordó que el exalcalde Manuel Morales tuvo problemas judiciales, por mala administración, y no lo dejaron entrar a la comuna en los dos últimos años de su período. Herbi Zamora, quien ganó las elecciones para la gestión actual, no pudo asumir porque no era de Pueblo Nuevo Viñas y no se había avecindado, como dicta la ley, por lo que en su lugar asumió Yumán, que era el concejal primero.