Inicialmente atribuidos a un ‘Torvosaurus tanneri’, una especie que vivió en América del Norte, los paleontólogos determinaron finalmente, después de analizar la tibia, la mandíbula superior, los dientes y una parte de las vértebras de la cola, que se trataba de hecho de una especie nueva que bautizaron como ‘Torvosaurus gurneyi’.
Este temible dinosaurio poseía afilados dientes de diez centímetros, lo que indica que debió estar en lo más alto de la cadena alimenticia de la península ibérica hace 150 millones de años, precisaron los autores, Christophe Hendrickx y Octavio Mateus, de la Universidade Nova y del Museo da Lourinha, en Lisboa.
Su trabajo apareció en la revista científica estadounidense PLOS ONE.
El número de dientes, así como el tamaño y la forma de la boca, parecen diferenciar al Torvosaurus europeo de aquel que vivía en América del Norte, señalaron.
“Era sin duda un feroz depredador”, dijo Mateus a la AFP. “Donde llegaba, era el amo y señor. El Torvosaurus no tenía rival durante el Jurásico tardío. Es el equivalente al T. Rex, pero 80 millones de años antes”, apuntó.
Pero “no se trata del dinosaurio depredador conocido más grande”, aclaró Hendrickx, quien puso como ejemplos el tiranosaurio y el gigantosaurio, los carnívoros más importantes del Cretáceo, un período geológico de hace entre 145.5 millones y 65.5 millones de años, cuando los dinosaurios desaparecieron.