Liberal sin neo

Especular no es delito

La Diaco cree saber cuál “debería” ser el precio del güisquil.

Habrá que estar atentos a que en los próximos días aparezcan titulares como “interceptan cargamento de repollo”, “allanan bodega con güisquil y aguacate”, “detienen a integrantes de una red de traficantes de verdura” o “SAT se constituye en querellante adhesivo en caso especuladores de cebolla” y “dos mujeres detenidas por comprar papa hoy para venderla más cara mañana”.

“El objetivo es determinar en qué etapa de la cadena se está produciendo el delito”.

En actos oficiales ocurren cosas que se prestan a la sátira y sarcasmo, pero que al ser apreciados con seriedad son penosos y hasta peligrosos. Personas investidas con autoridad se toman tan en serio a sí mismas que pueden actuar de manera totalmente divorciada de la realidad; creen saber cuál “debería” ser el precio del güisquil. 

“Debido a indicios de especulación en los precios de los vegetales y frutas de la canasta básica, la Dirección de Atención y Asistencia al Consumidor (Diaco) presentó una denuncia penal en el Ministerio Público (MP)”, informa el Diario de Centro América el 16 de julio. La titular de la Diaco señaló que “se han detectado incrementos injustificados en artículos como cebolla, papa, tomate, güisquil, repollo, aguacate y cilantro”. “Con esta denuncia buscamos sancionar a los responsables y poner fin a estas prácticas abusivas”, afirmó la funcionaria. “La acusación abarca a todos los involucrados en la producción, distribución y comercialización de vegetales y frutas… sugiriendo que la especulación podría tener su origen en La Terminal y en el Cenma”. “El objetivo es determinar en qué etapa de la cadena se está produciendo el delito”.

Otros medios informan que el documento que la Diaco presentó al MP denuncia penalmente a “productores, distribuidores, exportadores, industria, centros de acopio, intermediarios, mayoristas y detallistas, así como los que intervienen en la comercialización”.  Argumenta que varios productos tienen “una variación no proporcional a las condiciones del mercado” y solicitó que “sean practicadas todas las investigaciones necesarias para la averiguación de la verdad”.

Las lluvias se atrasaron este año y cuando arribaron lo hicieron con furia, en algunas regiones se dieron inundaciones y saturación de suelos.  Hay problemas en algunas carreteras, ocasionando dificultades al transporte de productos y personas. Tan solo estos hechos probablemente ofrecen una mejor explicación de aumentos temporales en los precios de ciertos productos agrícolas en el mercado.

Es imposible navegar la existencia sin especular. En el sentido económico, la especulación es propia de la acción y naturaleza humana. El comercio y la actividad productiva en general dependen crucialmente de personas que se arriesgan a comprar con la esperanza de poder vender más caro.

Especular en el mercado no es delito; es sano y necesario. El mejor antídoto contra potenciales efectos negativos de la especulación es un mercado competitivo. La falta de competencia habilita la especulación malsana. La competencia no se consigue por una “ley de competencia” o con inspectores de precios hostigando comercios, sino reduciendo regulaciones, requisitos y costos para participar en el mercado. Malos caminos y carreteras son enemigos del comercio fluido; puertos y aduanas son temas para otro día.

Se puede “especular” que los actos de la Diaco obedecen a ignorancia, o a teatro. El MP no tiene que caminar lejos para averiguar la verdad, basta con pensar un poco; es improbable que encuentre a los supuestos delincuentes que están encareciendo el repollo en la Terminal y el Cenma. Más preocupante es que las autoridades de la Diaco y Mineco se crean el cuento que cuentan.

ESCRITO POR:

Fritz Thomas

Doctor en Economía y profesor universitario. Fue gerente de la Bolsa de Valores Nacional, de Maya Holdings, Ltd., y cofundador del Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (CIEN).

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