Ciencia
Falla del Motagua: cómo su activación causó el devastador terremoto de 1976 en Guatemala
La activación de la falla del Motagua fue el evento que desencadenó el devastador terremoto de 1976 en Guatemala, y también generó el sismo la noche del pasado martes 11 de junio.
Devastación en Guatemala tras el terremoto de 1976, provocado por la activación de la falla del Motagua. (Foto Prensa Libre: Hemeroteca)
El 4 de febrero de 1976, Guatemala se despertó violentamente a las 3.01 de la mañana con un sismo de 7.5 grados en la escala de Richter.
Este potente terremoto se generó por la activación de la falla del Motagua, conocida por su actividad sísmica, siendo responsable de varios terremotos significativos en la región.
La falla también fue escenario de un sismo de magnitud 4.9 la noche del 11 de junio, cuyo epicentro se ubicó a 17 kilómetros de la Ciudad de Guatemala, cerca de San Pedro Ayampuc, según informaron fuentes oficiales.
En 1976, durante el terremoto, la energía liberada por este evento sísmico en esa falla tuvo consecuencias catastróficas para el país.
En tan solo 35 segundos la energía liberada por el terremoto, equivalente a la explosión de 2 mil toneladas de dinamita, causó una destrucción masiva.
Su epicentro tuvo lugar cerca de Los Amates, Izabal, y su hipocentro tuvo una profundidad de cinco kilómetros, desde donde se escaparon las ondas sísmicas que llegaron a la superficie.
Según datos históricos, la ruptura por el movimiento de placas fue bastante amplia, se extendió por más de 200 kilómetros a lo largo de Izabal hasta Chimaltenango.
Ciudades completas fueron borradas del mapa. Chimaltenango, en el centro de Guatemala y entrada hacia el altiplano, y Guastatoya, la cabecera de El Progreso, fueron devastadas completamente.
Ambas ciudades están asentadas sobre la falla del Motagua, la cual se activó ese fatídico día, causando la devastación total de estas áreas.
El terremoto cobró la vida de no menos de 23 mil personas y dejó a 77 mil con heridas graves. Aproximadamente 258 mil casas fueron destruidas, dejando a alrededor de 1.2 millones de personas sin hogar.
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¿Qué es la falla del Motagua?
La falla de Motagua es responsable de la generación de actividad sísmica significativa en Guatemala y el sureste de México.
La característica de esta falla es que es transformante, en la que dos bloques de la corteza terrestre se deslizan lateralmente uno junto al otro, según exponen diversos estudios del Instituto Nacional de Sismología, Vulcanologia, Meteorologia e Hidrología (Insivumeh).
A diferencia de las fallas normales o inversas, que implican movimiento vertical, las fallas transformantes se caracterizan por el movimiento horizontal.
Esta fractura tiene un desplazamiento promedio estimado entre 6 y 10 milímetros por año.
¿Por qué fue tan devastador el terremoto de 1976?
La magnitud del desastre que se generó en el terremoto de 1976 se relaciona directamente con la enorme cantidad de energía liberada durante el choque y movimiento de dos placas tectónicas: la placa Caribeña al sur, que incluye al río Motagua y se extiende hasta Panamá, y la placa Norteamericana, que traspasa Guatemala, México, Estados Unidos y llega hasta Alaska.
La falla del Motagua es un lugar de acumulación de estrés tectónico, y cuando este estrés se libera de manera súbita, como ocurrió en el 76, se producen terremotos devastadores, explicó Jorge Girón Mazariegos, geólogo del Instituto de Investigaciones de Ingeniería, Matemáticas y Ciencias Físicas (IN3) de la Universidad Mariano Gálvez, en una entrevista en 2023, al cumplirse 47 años del evento.
El experto detalló que donde ocurrió el terremoto "esa línea de contacto es precisamente la recta del Motagua, donde se dan los eventos fuertes y repetitivos, y la naturaleza acumula bastante energía que hace que las placas se muevan centímetros o metros”.
Según Girón Mazariegos, según estudios del Servicio Sismológico de Guatemala (SSG), si el movimiento es de centímetros, las magnitudes de los sismos oscilan entre los 5 y 6 grados; sin embargo, cuando los movimientos son muy fuertes y alcanzan los 7.4 grados o más, como ocurrió en el terremoto del 76, el subsuelo se fragmenta mucho más, resultando en una devastación mucho mayor.
Según el geólogo, la repetición del evento sísmico en la falla del río Motagua es un hecho probable debido a la activación de sus dos contactos tectónicos.
Según estima, hay entre 55 a 60 años de probabilidad de que se repita el evento.
De acuerdo a sus proyecciones, en caso de ocurrir un evento similar, en comparación con el pasado, la población actual es mucho mayor, lo que podría resultar en un mayor número de heridos, posiblemente superando el millón de personas.
Para enfrentar un desastre de esta magnitud, el experto enfatizó la importancia de la cultura de prevención y la preparación para sismos.
"Es fundamental que los guatemaltecos estén conscientes de su exposición a los sismos y sepan cómo actuar para salvarse a sí mismos, a su familia y a su comunidad en caso de un desastre", afirmó.