por la libertad
Azúcar: eliminemos todas las barreras
No se necesita una ley de competencia para que baje el precio del azúcar sino desregular y eliminar todas las barreras.
Debido a mi artículo de la semana pasada, Ley de Competencia, costosa e innecesaria, recibí varios comentarios. Uno de ellos me pedía que explicara el mercado del azúcar en Guatemala. Mi conclusión es que hay proteccionismo de parte del Gobierno con barreras arancelarias y no arancelarias, y por ello el precio local del azúcar es alto.
Mi conclusión es que hay proteccionismo de parte del gobierno con barreras arancelarias y no arancelarias y por ello el precio local del azúcar es alto.
El precio internacional del azúcar, de acuerdo con el contrato Continuo No. 11 de azúcar, SB00 (un contrato de futuros que se cotiza en el US: ICE Futures U.S. basado en el precio de referencia del azúcar sin refinar de tipo crudo) está en US$18.80/qq. Como es azúcar sin refinar, hay que agregarle +/- US$4.50/qq. El precio internacional refinado sería de US$23.30/qq. Los panaderos, pasteleros, fabricantes de caramelos, jaleas y cualquier otra empresa que utilicen azúcar en su proceso con altas temperaturas deberían poder importar azúcar a este precio. Podrían utilizar azúcar sin refinar en algunos de estos procesos, pero, para simplificar este ejercicio matemático, supongamos que usan azúcar refinada. Se tendría que incrementar en una economía libre y abierta, sin proteccionismo, serían los fletes marítimos, el terrestre y el seguro. El precio final no debería superar, exagerando, los US$30/qq puesto en la fábrica guatemalteca.
Veamos el mercado interno de azúcar. El precio del azúcar refinada se vende a US$41/qq a los fabricantes. Al consumidor final se le vende a US$50/qq (US$50 centavos/libra). La venta al consumidor se puede explicar por empaque, distribución, tamaños, margen de los distribuidores y de los comercios. Lo que está fuera de lo normal es el precio a los fabricantes, que es un 36.7% superior en nuestro ejercicio al precio en que un fabricante podría importar el azúcar si tuviera la posibilidad de importarla libremente. Pero no puede. En primer lugar debe pedir permiso al Ministerio de Salud, quien tarda siglos en aprobar una importación. En segundo lugar, existe una ley que dice que no puede importarse azúcar si no está fortificada o si no se ha autorizado a algún importador que la importe y tenga su proceso de fortificación con vitamina A. Y por último, la azúcar importada debe pagar un arancel de importación del 20%. ¿Qué tal?
No se necesita una ley de competencia, sino liberar el mercado, eliminar cualquier barrera arancelaria (el 20% del arancel) y las no arancelarias (los permisos y la fortificación). Cuando la ley de fortificación con vitamina A del azúcar pasó, los productores de azúcar se oponían. Ahora son sus principales defensores, pues es una barrera no arancelaria. Es verdad que la vitamina A es crucial para la salud de los ojos, la piel y el sistema inmunológico, por lo que su consumo ayuda a prevenir deficiencias nutricionales y enfermedades relacionadas. Pero ¿por qué la obligación a fortificar toda la azúcar de Guatemala, encareciendo el producto a todos los guatemaltecos? La vitamina A es sensible a altas temperaturas y se degrada fácilmente en procesos industriales como el horneado para la elaboración de pan, pasteles, caramelos u otros productos. La fortificación de azúcar con vitamina A no es efectiva en productos que requieran cocción a altas temperaturas.
El mercado del azúcar está protegido con barreras arancelarias y no arancelarias. Si queremos que el precio del azúcar disminuya, hay que permitir la libre entrada de azúcar del mercado internacional y eliminar todas las barreras que existen. No se necesita una ley de competencia para que baje el precio del azúcar, sino desregular y eliminar todas las barreras.