En el Congreso de la República, con motivo del tercer informe de gobierno, Morales habló de la responsabilidad de la ciudadanía en auditar el proceso electoral y mencionó el intervencionismo.
“Voy a hablar de soberanía: según nuestra Constitución, el soberano es el pueblo de Guatemala, quien, a través de un sufragio, es decir, a través de un voto, cada cuatro años delega esa autoridad y esa soberanía en las autoridades electas; en el binomio presidencial, en 158 diputados, en 340 alcaldes junto a sus corporaciones municipales…”, dijo Morales.
Morales continuó: “Es menester de todo ciudadano acudir a cumplir el derecho y deber ciudadano el día de las alegres elecciones 2019 en Guatemala. Sobre este tema, finalizo pidiéndole a la ciudadanía mucha seriedad, disciplina; para que se convierta cada guatemalteco en un vigilante de un proceso transparente, libre, no intervenido y en paz”.
El 7 de enero pasado, cuando Morales clausuró el convenio de Cicig, también habló de intervencionismo en el proceso electoral y envió un mensaje a los magistrados del TSE: “El que quiera hacer política, dentro de pocos días el Tribunal Supremo Electoral convocará a elecciones libres, espero no intervenidas. Le pido también a los magistrados del Tribunal Supremo Electoral su dignidad, su justicia, su equidad, para que nuestras elecciones, como lo establece nuestra Ley, sean democráticas, libres y el pueblo elija a sus autoridades”.
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Arzú Escobar, al tomar posesión por segundo año consecutivo de la presidencia del Congreso, dijo que se desveló y evitó un “golpe de Estado democrático” e instó participar en las elecciones.
“Al desenmascarar estas oscuras intenciones -golpe de Estado democrático- y evitar que se concreten, nos corresponde a todos participar en un elecciones libres y transparentes. El garante de esa libertad y esa transparencia, como la garantía del respeto al voto popular es únicamente del Tribunal Supremo Electoral”, señaló.
Sin fundamento
Rubén Hidalgo, director del Instituto Centroamericano de Estudios Políticos (Incep), explicó que el TSE ha fortalecido su organización, logística y legislación. Ha habido “elecciones bien organizadas” y por esa razón sostiene que no hay temores de “intervencionismo”.
Hidalgo expuso: “El TSE se convierte en la institución que materializa la voluntad del guatemalteco emitida en los sufragios, en esa parte estamos muy bien -en organización y legislación- y no hay porque tener ningún tipo de temor, tenemos instituciones que pueden garantizar que el proceso electoral no sufra manoseo o que responda a intereses de un grupo”.
Hidalgo sí coincidió con Morales en algo: “La ciudadanía debe ser responsable para cumplir los papeles que nos corresponda y las instituciones también deben acompañar el proceso electoral, deben ser estrictos”.
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José Carlos Sanabria, politólogo de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales, indicó que el discurso de Arzú Escobar fue “consistente, basado en que promovió ideas como la defensa a la soberanía y desacreditación del trabajo de la Cicig”, y lo calificó como un intento de “desacreditar el trabajo de Cicig que hizo con el TSE” para fortalecer los mecanismos anticorrupción.
“El discurso de él -Arzú Escobar- tiene conclusiones falsas, porque no ha existido la planeación de un golpe de Estado democrático. En lo que estamos claros es que el TSE transmite el resultado electoral y coincido con el presidente del Congreso en que el tribunal es el encargado de organizar las elecciones, y ha demostrado hacerlo con eficacia en más de ochos procesos”, dijo Sanabria.
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