En agosto pasado se constató la existencia de un socavón que ponía en riesgo la interconexión entre ambos municipios. Para el 19 de ese mes se confirmó el agrietamiento y deslave de la ladera.
En un segundo recorrido, la erosión era mayor y se encontraba más cerca de los carriles donde transitan unos 35 mil vehículos diariamente.
Hasta el 25 de agosto pasado, los trabajos de Covial habían consistido en colocar nylon en la cima del cerro para evitar que se siguiera lavando con la lluvia; sin embargo, el problema tiene su origen por una tubería de aguas fluviales que atraviesa la calle y queda a mitad del cerro.
Este 19 de octubre, autoridades de Covial dieron una actualización del trabajo que se ha hecho en el lugar y señalaron que lanzaron concreto de alta resistencia. “Es un muro de suelo enclavado tipo soil nailing, con anclajes activos y pasivos”.
Además, indicaron que las medidas actuales del talud son de 32 metros de altura por 40 de largo.
(Vídeo: cortesía Covial)