Rubén Téllez, vocero del Ejército de Guatemala, dijo que continúan las operaciones en los departamentos de San Marcos y Huehuetenango, con el objetivo de fortalecer la gobernabilidad y la seguridad sobre el límite político internacional entre Guatemala y México.
Explicó que son más de dos mil soldados del Ejército guatemalteco que se encuentran desplegados en toda esa zona fronteriza, con la finalidad de evitar cualquier intromisión de agentes que puedan poner en riesgo la seguridad de los guatemaltecos en ambos departamentos.
“Los municipios de Tacaná, en San Marcos, así como Cuilco, en Huehuetenango, son puntos de prioridad. En Cuilco se está evaluando ya la posibilidad de la instalación de una base de patrullaje del Ejército de Guatemala”, comentó Téllez.
EN ESTE MOMENTO
Señaló que la presencia, tanto del Ejército de Guatemala como de la Policía Nacional Civil, y más de 400 operaciones interinstitucionales que se han realizado en este período de tiempo han reducido de buena manera la conflictividad y también los actos de delincuencia en toda esa región.
“Estas son operaciones que realiza el ejército de Guatemala en conjunto con el ministerio de gobernación, siguiendo instrucciones del señor presidente de la República para evitar cualquier posibilidad de que grupos relacionados con el crimen organizado nacional crucen hacia territorio guatemalteco y pongan en zozobra a la población de esos departamentos”, señaló Téllez.
Guerra entre narcos
La guerra entre el Cartel de Sinaloa (CDS) y el Jalisco Nueva Generación (CJNG) de México ha escalado a niveles más dramáticos al punto de que en el municipio de Motozintla, Chiapas, México, fronterizo con Tacaná, San Marcos, Guatemala, ha sido centro de enfrentamientos entre estos grupos del crimen organizado.
Las batallas de los grupos criminales en Chiapas han causado el cierre de comercios, suspensión de clases y el desplazamiento de pobladores a zonas más seguras, entre ellas, aldeas de Tacaná en territorio guatemalteco.
Los ataques han causado pánico en pobladores de comunidades de Tacaná, San Marcos, vecinas con Motozintla, Chiapas.
El gobierno de Guatemala había enviado a personal de la Policía Nacional Civil (PNC) y del Ejército a las fronteras de Tecún Umán, San Marcos y La Mesilla, Huehuetenango, porque en estas localidades se denunció la presencia de narcotraficantes mexicanos que atacaron a guatemaltecos en territorio nacional. Al menos cinco policías municipales murieron en forma violenta.
Ambas instituciones desplazaron contingentes de elementos para blindar la frontera común.
Desde el lunes 18 se confirmó la presencia de caravanas de vehículos agrícolas con hombres armados y pasamontañas que se identificaban con el CDS, y quienes amenazaron con sacar al CJNG y quienes les apoyen, según citan medios chiapanecos.