Así, detectaron que 113 mil mujeres que dormían con una alta exposición a la luz sufrieron un aumento de su índice de masa corporal y de su talla de cintura, si bien no pudieron determinar la causa de esta relación.
“La asociación que hemos visto entre la exposición a la luz durante la noche y la obesidad es muy intrigante. No podemos decir todavía cuál es la razón de esta relación, pero los resultados dejan abierta una futura investigación muy interesante”, afirmó el investigador Anthony Swedlow.
Según el estudio, el metabolismo está afectado por “ritmos cíclicos del cuerpo” vinculados a los hábitos de dormir, caminar y exponerse a la luz.
Por su parte, la doctora Emily McFadden, coautora del estudio, apuntó que la relación entre dormir con mucha luz y ser obeso se apoya en investigaciones anteriores sobre el impacto de la luz en el metabolismo, aunque insistió en que “son necesarios” nuevos estudios.
El trabajo ha sido financiado por la organización británica de lucha contra el cáncer de mama Breakthrough Breast Cancer y se publicó en la revista estadounidense American Journal of Epidemology.
Uno de los investigadores de esa asociación afirmó que “es demasiado pronto para sugerir que dormir en la oscuridad ayuda a prevenir la obesidad, un factor de riesgo para el cáncer de mama, pero la relación es realmente interesante“.