Se trataba del periodista ucraniano Prankster Vitalii Sediuk, cuyas proezas de dudoso gusto ya dieron la vuelta al mundo cuando intentó besar a Will Smith en otro pase de celebridades.
El individuo se aproximó a Ferrara por detrás e introdujo la cabeza debajo de su amplia falda de gasa color malva, ante la incredulidad de propios y extraños.
Lo que primero pareció un accidente se confirmó como una estratagema cuando, segundos después, los responsables de seguridad le sacaron en volandas, mientras se reía por su hazaña.
La actriz, que comparece en la 67 edición de Cannes como dobladora, no perdió la compostura y dejó a los guardaespaldas ocuparse de la situación.
No es la primera vez que la alfombra roja del certamen mediterráneo causa algún disgusto a sus divas.
Eva Longoria, Olivia Palermo, Arta Dobroshi, Uma Thurman Rosario Dawson, Svetlana Metkina, Bai Ling, Phoebe Price, Lindsay Lohan o Sophie Marceau protagonizaron diferentes descuidos ante las cámaras de la Costa Azul, que fotografiaron más carne de lo que hubieran querido las musas.
Otros, menos accidentales, lograron la reacción que buscaban, como la actriz porno Yasmine Lafitte, que en 2007 abrió graciosamente su falda ante los fotógrafos, dejando ver que no llevaba ropa interior y sin perder la sonrisa.