Este movimiento comenzó luego de darse a conocer la noticia del secuestro de 200 estudiantes por el grupo islamista Boko Haram.
El grupo nigeriano secuestró hace tres semanas a las estudiantes y amenazó con venderlas como esclavas.
La campaña pretende reclamar los derechos de las estudiantes y crear conciencia a las autoridades para que localicen lo antes posible a las estudiantes.
Usuarios de diferentes partes del mundo comparten fotografías de familiares reclamando justicia por sus hijas, mientras otros apoyan la campaña con anuncios en las calles.
Medios de comunicación se han hecho presentes con el hashtag dándole seguimiento a la noticia y brindado esperanza a las familias de los afectados.
El secuestro de las estudiantes ha causado repudio en las redes sociales y el hashtag se ha vuelto trending topic en las últimas horas.
Con más de 600 millones de adolescentes alrededor del mundo que han recibido educación gracias al apoyo de diferentes donaciones.
Malala Fund se enfoca en ayudar a niñas específicamente para que puedan tener educación y no sean víctimas de esclavitud y prostitución.