Durante cinco generaciones la familia de Fuentes ha estado al frente del Circo de los Hermanos Gasca en la Ciudad de México, pero una nueva ley sembró de dudas su futuro.
La semana pasada la Asamblea Legislativa de la Ciudad de México prohibió el uso de animales en los circos, medida que llega como respuesta a los meses de presión por parte de los activistas por los derechos de los animales.
La ley entrará en vigor de aquí a un año y promete elevadas multas por incumplimiento.
Anima Naturalis, uno de los grupos que apoyan la medida, dice los animales exóticos utilizados en el circo a menudo están expuestos a largos períodos de transporte incómodo, junto con pequeños recintos para alojarse y métodos de entrenamiento agresivos.
Ciudad de México y otros seis de los 32 estados mexicanos ya prohibieron la presencia de animales en un circo.
Pero no son los únicos.
Este tipo de prohibiciones se ha extendido últimamente por toda América Latina y la familia Fuentes teme que la ley federal mexicana siga los pasos de la ley de la capital.
Fuentes dijo que le preocupaba que la genta no fuera al circo tan solo por las acrobacias, los trapecios y los payasos.
“Esto es el circo, esto es magia” dijo Fuentes, de 32 años. “Es a lo que he dedicado toda mi vida desde que tenía 15 años y ahora ellos me lo quieren quitar”.