“Precisaba un líder concentrado, con voz de mando, le di la cinta de capitán y le dije que era el primero en la lista de los 23 que venían al Mundial y él esta cumpliendo con creces” , apuntó el DT.
El exdefensa del FC Barcelona y del AS Mónaco es el jugador mexicano con más partidos jugados en los Mundiales, 15 con los tres disputados en la fase inicial de Brasil-2014, su cuarto Mundial después de Corea del Sur y Japón-2002, Alemania-2006 y Sudáfrica-2010.
Ahora juega en la posición de líbero con dos centrales a sus lados, los eficaces Héctor Moreno y Francisco Maza Rodríguez, para aprovechar su limpia salida de balón y su pase en largo.
Esa línea de tres, apoyada por los carrileros Miguel Layún y Paul Aguilar, más la destacada tarea de Guillermo Ochoa en el arco, ha llevado a que México tenga una solidez defensiva que solo ha permitido un gol en tres partidos en Brasil 2014.
En efecto, recién el lunes en el Arena Pernambuco de Recife (noreste), el Memo Ochoa vio como caía su arco por primera vez en el Mundial a los 87 minutos del partido contra Croacia, cortando una imbatibilidad que llevaba 287 minutos.