Y eso, precisamente, es lo que ha pasado este año, pues las alzas acumuladas ya suman un promedio de Q16 por galón, equivalente a más del 60%, si se considera que el 1 de enero pasado, el precio promedio de este producto era de Q24.51, mientras que ayer, el costo de referencia era de Q40.59 en modalidad autoservicio, en el área metropolitana.
Ello, independientemente de que el gobierno impulsó (y el Congreso aprobó) un Apoyo Social Temporal a los Consumidores de Combustibles, (gasolina y diésel), por un total de Q2 mil 893 millones de los cuales, se reporta una ejecución 95.1% (Q2 mil 339 millones), de acuerdo con el Sistema de Contabilidad Integrada (Sicoin) del Ministerio de Finanzas (Minfin).
Ante esta situación, un sector del transporte de carga organizó propuestas que incluyen bloqueos a diferentes rutas de importancia nacional, con las consiguientes pérdidas y molestias para empresarios y ciudadanos en general.
Sin solución a la vista
Consultado sobre la posibilidad de una prórroga a la subvención, el ministro de Energía y Minas, Alberto Pimentel, expuso que “seguimos en una mesa de trabajo de gobierno, discutiendo medidas; hay una dificultad que ya he comentado en el pasado y es que estamos llegando al final del año; eso significa que no hay espacios presupuestarios disponibles que podamos comprometer”.
Y añadió que no se ha encontrado una solución paliativa al asunto, pues además, “congelar los precios del combustible sería incumplir con la ley de comercialización de hidrocarburos que en su artículo 5 indica que ninguna autoridad de gobierno puede manipular los precios del mercado”.
En tanto, el viceministro de Energía y Minas encargado del área de hidrocarburos, Luis Ayala, amplió que “el organismo Ejecutivo está consciente de que el precio del diésel incide en el costo de la canasta básica y esa fue la razón del subsidio por Q5 y Q7 (por galón). Sin embargo, la semana próxima se instalará una mesa técnica con transportistas para buscar una iniciativa que permita mantener mayor estabilidad en el precio durante el siguiente año”.
Por lo tanto, las acciones se están previendo a mediano plazo y aunque no quiso especificar, el funcionario indicó que hay un pliego de ocho escenarios que van desde más subsidios, pero al consumidor final, hasta ayudas focalizadas para el transporte de carga y personas, lo que dependerá de la disponibilidad financiera. También indicó que tras la aprobación del presupuesto por el Congreso para el siguiente ejercicio fiscal (Q115 mil 443 millones), ya se pueden empezar a discutir esas opciones.
El contexto internacional
El precio del diésel en el mercado internacional sigue estable, pero con tendencia alcista, y no se han registrado mayores cambios en las últimas semanas, localmente se hallan entre Q38 y Q41 por galón.
En la actualidad, se mantiene la incertidumbre por el conflicto entre Rusia y Ucrania, aparte de que no necesariamente hay una demanda real, porque en el mercado internacional hay mucha especulación, “y se sabe que viene la época fría en Europa, no hay suficiente gas natural en el mercado empieza y va a ser sustituido con diésel”.
Esa serie de situaciones causa un sobrecosto local de alrededor de Q8 por galón, según cálculos de la Dirección General de Hidrocarburos (DGH), de manera que según el viceministro, “estamos en una etapa en la que se estancó el precio del diésel y no se prevén cambios bruscos hacia el alza, pero tampoco a la baja”.
Impacto en las operaciones
Los registros de otros años indican que en esta temporada, el galón de diésel ronda entre Q30 y Q32, y ahora se ubica en más de Q40. En la estructura de costos operativos, para el rubro de combustible diésel, en los últimos años se tenía considerado un costo promedio del 30% (más), pero con los últimos incrementos, se ha incrementado hasta al 48%, resaltó José Alejandro Ramirez, director ejecutivo de la Cámara Guatemalteca de Transporte de Carga.
Ello se suma al costo de mantenimiento de vehículos, como reparación de estructuras metálicas, alto deterioro del sistema de frenos y de aire, acelerado desgaste de motor, alta frecuencia de reparación de suspensiones, entre otros gastos.
Además, deben incluir el costo de los “tiempos muertos”, que afectan la eficiencia y calidad de los servicios; largas horas de espera en puertos y aduanas derivado de procesos lentos y engorrosos; velocidad lenta en ruta derivado del mal estado de las carreteras; restricciones de movilidad entre distintos municipios; y mayor consumo de diésel, enumeró.
Ligera reducción
Enrique Meléndez, director de la Asociación Guatemalteca de Expendedores de Gasolina (Ageg) comentó que en los últimos días se ha empezado a observar una ligera reducción en el precio del diésel, lo que se explica porque Europa ya cuenta con un acopio significativo de ese combustible para enfrentar el invierno.
“Eso va a depender de la demanda en ese continente para la generación de energía eléctrica, pero en el caso de Guatemala, se esperaría una reducción en el diésel para esta semana”.
Reconoció que a inicio de año el precio promedio por galón era de unos Q25 y en los últimos días superó los Q40, pero se esperaría que al bajar la demanda de Europa, pueda ir cediendo el precio internacional, lo que se reflejaría en el mercado local.
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