Las bases de la licitación se encuentran disponibles en el Sistema de Información de Contrataciones y Adquisiciones del Estado (Guatecompras), bajo el Número de Operación (NOG) 18509118. Podrán ofertar empresas nacionales inscritos y habilitados en el Registro General de Adquisiciones del Estado adscrito al Ministerio de Finanzas Públicas (Minfin).
De acuerdo con las bases respectivas, las obras del aeropuerto de carga se llevarán a cabo mediante la Unidad Especial de Ejecución denominada Fondo Social de Solidaridad (FSS) del CIV, y serán financiadas con fondos asignados a proyectos de inversión de esa entidad.
El cierre de recepción de ofertas y apertura de plicas está fijado para el día 22 de diciembre del 2022, a las 15 horas en la sede del FSS. Se espera que la obra se lleve a cabo en un plazo de 10 meses calendario, a partir de la suscripción de la orden y acta de inicio de la ejecución del proyecto.
La descripción
Según lo publicado en Guatecompras, el CIV busca contratar a una empresa para construir un carril de desaceleración que permitirá a conductores desviarse desde la ruta CA-9A hacia el ingreso de las instalaciones del nuevo aeropuerto y viceversa para retornar a la carretera. El carril tendrá 1.04 kilómetros de longitud y 6 metros de ancho.
Asimismo, se espera la construcción de dos caminos de terracería. El primero, de 400 metros, librará la ampliación de pista en la cabecera norte, y el segundo que restituye el paso de una calle existente que libra la calle de taxeo en la zona sur, con 700 metros de longitud.
También se contempla la conformación de plataformas para hangares, áreas de importaciones/exportaciones, con parqueo y helipuerto (de terracería). Asimismo, trabajos de señalización en todo el complejo aeroportuario y pavimentación, rotulación y colocación de malla ciclónica en el muro existente de Radar Radiofaro Omnidireccional de muy alta frecuencia (VOR).
Las obras también abarcan la edificación de un albergue de generadores eléctricos del aeropuerto y el sistema de ductos para el cableado eléctrico, así como el abastecimiento de agua potable y conducción de aguas residuales, entre otros.
Traslados
En una entrevista reciente a Prensa Libre, Jorge Gómez, director ejecutivo del Comité de Operación de la bodega de Carga Aérea (Combex-Im), dijo que se tenía conocimiento de los trabajos previos, relativos a la preparación del terreno, los espacios y la terminal aérea, que se prevé estén terminados a mediados del otro año.
“Posterior a ello es que iniciaría cualquier tipo de gestión relacionada con la implementación de un depósito aduanero temporal o el inicio de operaciones; entonces, es un proceso que va avanzando. Como Combex, hemos estado pendientes de los avances y estamos anuentes a los actores público y privado. Donde ellos necesiten operaciones logísticas y servicios de carga, ahí estaremos”, indicó.
Según el director ejecutivo de Combex-Im, al momento de habilitarse el aeropuerto de San José como terminal de carga, se necesitaría por norma, constituir un depósito temporal en una zona primaria aduanera aeroportuaria, que requiere como mínimo un terreno de 10 metros cuadrados y una construcción de 3 mil metros.
Luego se harían las adaptaciones para el buen manejo de la carga, la inocuidad, la agilización de los procesos y todo lo que conlleva levantar una infraestructura acorde a las necesidades de los importadores y exportadores.
Para Gómez, la habilitación de este aeropuerto para carga aérea tiene como beneficio contar con otras opciones y unir operaciones marítimas y aéreas para desarrollar un nuevo clúster logístico en la costa sur, que va más allá de trasladar las operaciones de carga del aeropuerto internacional La Aurora, pues se trata de ampliar el abanico de opciones para movilizar la carga.
En tanto, Werner Ovalle, intendente de Aduanas de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), dijo a Prensa Libre que hasta se desconoce el eventual traslado de Combex-Im a San José, Escuintla, pero que cuando le sea notificado al ente recaudador, se harán los trámites correspondientes para la habilitación de un depósito aduanero temporal.
Beneficioso, pero faltan estudios
Jean Paul Brichaux, presidente del Consejo de Usuarios del Transporte Internacional de Guatemala (Cutrigua), refirió que la posibilidad de habilitar un aeropuerto de carga constituye parte de la visión que deben tener los países sobre la construcción de polos de desarrollo, pues no solo significa fortalecer el sistema aeroportuario, sino que también abona a la conectividad en cuanto a transporte de pasajeros y mercadería.
Sin embargo, consideró que para ir de la mano con el desarrollo del sistema de movimiento de carga, se requiere avanzar en la inversión en infraestructura vial en el sector de la costa sur, especialmente, San José.
El directivo de Cutrigua también señaló que hasta ahora no tienen conocimiento de estudios previos relativos al comportamiento del flujo de carga y el tipo de esta que se movería hacia el nuevo aeropuerto. Y, por otra parte, tampoco se sabe cuáles aerolíneas están dispuestas a operar la carga, si les resulta competitivo y atractivo o si habrá nuevos operadores.
“Hasta ahora no nos han presentado estudios de carga y flujos de esta, ni tampoco qué aerolíneas estarían operando acá. Sería importante conocer eso para que se haga una buena inversión en infraestructura, que tanto necesita el país”, argumentó.
Inversión necesaria
Fanny de Estrada, directora de Relaciones Interinstitucionales de la Asociación Guatemalteca de Exportadores (Agexport), opinó que el país ha crecido mucho económicamente y se ha multiplicado la actividad comercial en los últimos 30 años, pero los puertos, carreteras y aeropuertos ya no cumple ni satisfacen las necesidades actuales, por lo que cualquier inversión que se haga para facilitar la logística y el movimiento de carga, es importante.
Según ella, cerca de este aeropuerto también está surgiendo una zona franca, que sirve para que se instalen centros de producción y que esa carga sea manejada desde ahí, pues al estar cerca de Puerto Quetzal, el comercio se facilitará aún más.
“Sobre el eventual traslado de Combex y el manejo de carga en este aeropuerto, habría que ver cuando esté terminado y sincronizar bien porque Guatemala no solo saca su carga en aviones cargueros, que son los menos. Mucha carga, entre esta, perecedera, se va en aviones de pasajeros y estos seguirían llegando al aeropuerto La Aurora. Trasladar todas las operaciones a San José tendría que ir atado a una carretera hacia el otro aeropuerto que mueva la carga de forma expedita”, agregó De Estrada.
¿Conexión con La Aurora?
La Agencia Nacional de Alianzas para el Desarrollo de Infraestructura Económica (Anadie) tiene en curso la actualización de los estudios de factibilidad de la modernización al Aeropuerto Internacional La Aurora, realizados entre 2017 y 2019, para contar con nuevos parámetros de las fases de preinversión.
Esa modernización aeroportuaria implicaría los posibles movimientos dentro del aeropuerto y la anuencia del Ministerio de la Defensa y del sector privado para ceder algunas áreas, por lo que, según se conoce, hay buena voluntad por parte de estos, a fin de que el aeropuerto cuente con una calle de rodaje más grande (pista de taxeo) para la atención de aviones con mayor capacidad de carga, y corregir la falta de suministros y atención en la terminal de pasajeros.
Al cierre de la edición, Prensa Libre no recibió respuestas del CIV a preguntas relativas al financiamiento de las obras y detalles en torno al traslado de las operaciones de carga aérea a este aeropuerto, construcción o reconstrucción de la pista principal y otras dudas.
