Es el caso del cementerio La Verbena, en la zona 7 capitalina, donde se pudieron observar a varios visitantes durante un recorrido efectuado por Prensa Libre y Noticiero Guatevisión.
Sin embargo, hubo varias familias que dijeron haber tenido problemas para encontrar a sus difuntos.
Algunos denunciaron que la administración del camposanto no tuvo el control suficiente para poder enterrar a los difuntos, así como para llevar control sobre su identificación, principalmente durante la emergencia de la pandemia del covid-19.
Es el caso de Amanda Pérez, de 40 años, quien dijo que la administración les dio indicación del lugar en el que se encontraba su suegra; sin embargo, a la misma tumba también llegó otra familia y ahora ninguno de ellos sabe dónde realmente están sus parientes.
“Estamos indignados y tristes porque mi suegra murió hace dos años y luego vino mi esposo a identificar dónde estaba, porque por la situación de la pandemia no dejaban entrar y ni siquiera dejaron que la funeraria tomara una foto del lugar”, contó.
“En la oficina, con papeles y todo, le indicaron que aquí era. Ahorita que venimos hay otra familia, entonces la que está allí no sabemos si es mi suegra”, relató.
“Aquí no han identificado. No sabemos si es correcto o no y hasta ahorita están verificando”, agregó.
Dijo que en la cuadra contigua ya encontraron también varios errores, en algunos casos el lugar que ya tiene nombre resulta que es otra persona.
“Realmente esto es indignante, ya hemos pasado lo suficiente como para que ahora nos digan que donde está nuestro ser amado no es él”, enfatizó.
El esposo de Pérez, Jorge Gerónimo, indicó que pondrá una denuncia en el Ministerio Publicó contra la administración, por el descontrol en el lugar.
Indicó que los trabajadores del cementerio culpan a los sepultureros de la confusión; sin embargo, la familia Gerónimo Pérez está consciente de que estos solo siguen instrucciones de la administración.