Después de una reunión de la selección de Francia en Clairefontaine el 19 de marzo de 2022, el futbolista pasó varias horas con un amigo de la infancia en Roissy-en-Brie, localidad donde creció. Alrededor de la medianoche, mientras se preparaba para regresar a su hotel de París, Paul Pogba fue conducido por otros conocidos del barrio a un apartamento en Chanteloup-en-Brie. Según pudo acceder el medio Le Mondé a la investigación, el jugador fue obligado a apagar su teléfono antes de que se lo confisquen.
En el momento aparecen dos hombres encapuchados, con chalecos antibalas y fuertemente armados. En dicho contexto, el volante es amenazado a pagar 13 millones de euros, incluidos 3 millones en efectivo, por la protección que dos hombres le habrían brindado durante años. Esta es la historia que Paul declaró el pasado 9 de agosto a los encargados de la causa de la Oficina Central de Lucha contra el Crimen Organizado para que avance la investigación por el intento de extorsión del que fue víctima.
Dos meses después de la presentación de su denuncia en Italia, cinco sospechosos, entre ellos su hermano Mathias Pogba, fueron imputados el sábado 17 de septiembre tras varios días bajo custodia policial antes de ser puestos en prisión provisional. Una de las escenas más escalofriantes de la amenaza, tuvo la descripción directa de Paul. “Estaba asustado. Los dos tipos me apuntaron con sus armas. Entonces en esa situación bajo amenazas, les dije que iba a pagar”, explicó a la policía.
Mathias Pogba, de 32 años, fue acusado de “extorsión en banda organizada” y “participación en una asociación criminal con el fin de preparar un crimen”. “Rechazamos esta decisión y se hará todo lo posible para garantizar que el señor Pogba sea liberado rápidamente”, dijo su abogado, Yassine Bouzrou. Otros cuatro sospechosos de entre 27 y 36 años, cercanos al jugador, ya conocidos por la policía en su mayoría fueron procesados por los cargos de “extorsión con un arma en una banda organizada”.
Sin embargo, el protagonista negó las acusaciones lanzadas por su hermano y lo calificó de “cobarde, traidor e hipócrita”. En otra audiencia, Paul estimó ante los investigadores que su hermano Mathias estaba “bajo presión” de personas que querían sacarle dinero y admitió que entregó 100.000 euros en el momento. La semana pasada, por medio de su abogado, Mathias dijo ser “totalmente ajeno a toda maniobra de extorsión” a su hermano.
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