Trate de darse cuenta de la creación del juicio hacia una persona sin valorar al ser humano que existe detrás de la crítica. Perciba en usted mismo y en la gente, como se focaliza en lo que escucha y repite de alguien, sin dejar en libertad al ser humano.
Debido a la crítica que se transmite de boca en boca se forma el personaje mental ficticio de alguien, el cual no es el verdadero ser de alguien. Sin embargo, es la figura con la que nos relacionamos, la imagen que lo identifica, la atadura mental de la palabra expresada y la persona, lo que trae pelea y confrontación.
Formamos estereotipos sin comprender o entender a las personas, además de burlarnos.
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Comprendamos que:
- La forma de tratar a los demás es como nos tratamos a nosotros mismos.
- Lo que sentimos hacia los otros es lo que llevamos en nuestro interior.
El desprecio hacia nuestros semejantes es el disgusto de no recibir aquello que nosotros queremos. El que se siente mal es uno, el otro solo hace lo que cree que es mejor.
Para diluir al personaje mental ficticio se necesita ver a las personas con el corazón y los ojos del espíritu, de esta manera viviremos en fraternidad.
Tengamos cuidado con todo aquello que expresamos acerca de una persona y en lugar de hablar mal de alguien, iniciemos a observarnos a nosotros mismos para percibir lo que llevamos por dentro y así dar el primer paso hacia nuestro cambio personal. En este proceso aprenderemos a ser compasivos con nosotros mismos y de esta forma dar compasión a los demás.
Si desea saber más de este tema, ingrese a Youtube: Personajes mentales ficticios – André Armas. Al mismo tiempo lo invito a escribir al WhatsApp 4293-5610 en donde le informaré de actividades sobre bienestar personal, vida plena y consciencia.
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André Armas , Educador y Consejero en Bienestar
Lo exhorto a vivir en unidad y amor, sin juzgar, ni criticar.
