No es lo mismo un resultado de TSH, por ejemplo, en una mujer joven y delgada de 23 años que busca un embarazo y que ha tenido pérdidas fetales que exactamente el mismo valor de la misma hormona en un hombre de 75 años con obesidad, aunque el rango de referencia sea el mismo para ambos en el laboratorio. A uno de estos dos casos se les prescribirá tratamiento con metas específicas y monitoreo, al otro no.
No es lo mismo una concentración de colesterol LDL en una persona asintomática sin antecedentes ni factores de riesgo que exactamente la misma medición en una persona con 2 infartos y diabetes mellitus, por más asintomática que esté. A una no se le dejará tratamiento, mientras a la otra incluso se le dejará una compleja combinación de fármacos para llegar a metas muy estrictas.
No es lo mismo medir un perfil hormonal en una mujer en edad reproductiva en cierta fase de su ciclo menstrual que en otra, como tampoco lo es medir las mismas hormonas en una mujer post menopaúsica; los mismos valores pueden significar cosas muy diferentes en cada caso. Es arte del médico no solo saber interpretar el resultado del examen, sino incluso el simple hecho de solicitarlo desde un inicio ya amerita análisis y no automatización.
No porque un resultado de laboratorio esté fuera del rango de referencia significa que usted necesita un fármaco, como tampoco el que esté por dentro del mismo significa que no lo amerite.
Todo examen de laboratorio es insignificante si no va acompañado de preguntas como: ¿quién es?, ¿por qué se le midió?, ¿ya tiene tratamiento para esto? ¿Es confiable este resultado?, ¿hace cuánto tiempo se midió esto, habrá cambiado algo en este lapso? ¿qué buscaban cuando se lo pidieron?
Cuando un médico solicita un examen de laboratorio, él debería pensar antes si de ese resultado se tomarán decisiones clínicas relevantes para el paciente, si se omitirán fármacos, si se añadirán, o si, por otro lado, todo va bien y se deberá seguir igual con conocimiento objetivo de la efectividad de la terapia.
Recordemos que los datos de laboratorio carecen de valor para tomar decisiones, que estos requieren ser procesados hasta convertirse en información aplicable en beneficio del paciente, situación que amerita conocimiento.
Tranquilidad
Dr. José Eleazar Girón Morales, Medicina Interna – Endocrinología
Los rangos de referencia en los laboratorios a veces hacen daño a la tranquilidad de los pacientes y a veces generan prescripciones, u omisiones, que son contrarias a la salud.