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¿Acaso una empresa emergente convertirá a la construcción sostenible en la siguiente frontera en los econegocios?

Cada vez más proyectos utilizan la tecnología sostenible desarrollada por Nexii Building Solutions, una empresa emergente con sede en Vancouver.

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Una grúa levanta un panel de Nexii en el Hotel Marriot de Nanaimo, Columbia Británica, Canadá, el 1 de junio de 2022. (Foto Prensa Libre: Jackie Dives/The New York Times)

Una grúa levanta un panel de Nexii en el Hotel Marriot de Nanaimo, Columbia Británica, Canadá, el 1 de junio de 2022. (Foto Prensa Libre: Jackie Dives/The New York Times)

El año pasado, Starbucks abrió en Abbotsford, Columbia Británica, casi una hora en automóvil al sureste de Vancouver, un café con servicio al auto construido de manera sostenible. Esta tienda, la primera de ese tipo, se erigió en seis días y prácticamente sin que la construcción generara desperdicio; por si fuera poco, sus componentes (muros, pisos y techo) se fabricaron con tal precisión que, al ensamblarse, crearon un sello hermético. Los creadores del diseño esperan que las necesidades de calefacción y refrigeración bajen un 30 por ciento, lo que reducirá la huella de carbono del local.

La construcción de este local de Starbucks estuvo a cargo de Nexii Building Solutions, empresa emergente de tecnología para construcción con sede en Vancouver que se ha convertido en una verdadera estrella en ascenso en la creciente industria de la construcción ecológica. El fundador de Nexii es el empresario Stephen Sidwell, que en la actualidad es su director ejecutivo. Fundada a finales de 2018, esta empresa alcanzó la categoría de “unicornio” (es decir, su valuación superó los US$1 mil millones) en 31 meses, logro que ninguna otra empresa había conquistado en un periodo tan breve en la historia de Canadá, según Nexii.

Aunque no es común que relacionemos el cambio climático con los edificios y la construcción, lo cierto es que son responsables de casi un 40 por ciento de las emisiones de carbono en el mundo relacionadas con la energía, según las Naciones Unidas. Alrededor del 30 por ciento de estas emisiones se originan en las operaciones de los edificios (principalmente calefacción, refrigeración e iluminación), y un 11 por ciento adicional es carbono emitido durante el propio proceso de construcción.

Sidwell creó a Nexii después de conocer a Ben y Michael Dombowsky, hermanos inventores que se han dedicado a la construcción desde los años setenta. Con el paso de los años, a estos hermanos comenzó a afligirles el desperdicio desenfrenado y la ineficiencia característicos de la industria y, en épocas recientes, su impacto en el clima.

Michael Dombowsky, actual vicepresidente de tecnología de construcción en Nexii, experimentó varios años con distintas técnicas de construcción eficientes para crear el sistema de construcción que más tarde patentó Nexii. Este sistema consiste en producir paneles prefabricados que se utilizan como parte de los muros, pisos y techos, en una planta de fabricación, desde la que se envían al lugar de la obra. Ahí, un pequeño equipo ensambla rápidamente los componentes para erigir el edificio. Nexii, con datos propios y del equipo de desarrollo de la tienda de Starbucks, ha constatado que este método es un 75 por ciento más rápido en comparación con el tiempo que tarda normalmente la construcción de estos establecimientos, explicó Gregor Robertson, vicepresidente ejecutivo de estrategia y alianzas en Nexii y antiguo alcalde de Vancouver.

El sistema de construcción utiliza tecnología avanzada, específicamente software de modelado en 3D, lo que garantiza una fabricación de lo más precisa.

“El software para diseñar edificios ha experimentado enormes avances en años recientes”, señaló Robertson. “Ahora podemos utilizar realidad aumentada para recorrer un edificio completo en la pantalla y revisar hasta el más mínimo detalle para asegurarnos de que todo se ajuste con una gran precisión”.

El siguiente paso es enviar los planos 3D a una planta de fabricación, donde se producen los paneles conforme a las especificaciones exactas.

“En el pasado, las constructoras creaban un modelo a escala o construían directamente con base en planos plasmados en papel, y lidiaban con los problemas o errores conforme iban apareciendo durante la construcción”, explicó Robertson. Con los modelos en 3D, todos los problemas aparecen en la imagen virtual y se resuelven mucho antes de que arranque la construcción.

Michelle Meisels, socia encargada de la división de Ingeniería y Construcción en la consultora Deloitte, puntualizó que, aunque la construcción con elementos prefabricados y modulares ha existido desde hace mucho tiempo, “ahora es una tendencia muy importante en ingeniería y construcción porque les permite a las empresas controlar de verdad el diseño de un edificio, los materiales que utilizan y su capacidad de reducir el desperdicio”.

Sin embargo, los hermanos Dombowsky ambicionaban hacer más cambios y no limitarse al proceso de construcción: les interesaba encontrar una alternativa al concreto tradicional, que es caro y pesado, además de tener una huella de carbono considerable.

Por más de 150 años, el cemento, el acero y el concreto han sido los principales materiales empleados en la construcción, lo que no sería ningún problema en un mundo sin cambio climático, comentó Gaurav N. Sant, primer titular de la Cátedra Pritzker en Sostenibilidad en la Escuela de Ingeniería Henry Samueli de la Universidad de California, en Los Ángeles, y director del Institute for Carbon Management.

“El problema es que en este momento hay una necesidad urgente de reducir las emisiones, así que debemos producir estos materiales para construcción siguiendo un método diferente, o bien remplazarlos con materiales que tengan una menor huella de carbono”, afirmó.

Ben Dombowsky, actual vicepresidente de Desarrollo de Productos en Nexii, dedicó 10 años a la tarea de crear una alternativa para el concreto. En 2017, presentó Nexiite, el material de construcción no tóxico de propiedad exclusiva que ahora se emplea para crear los paneles de Nexii. La empresa contrató los servicios de Rob Sianchuk Consulting, en la Columbia Británica, y le encomendó realizar pruebas externas de los paneles. Los hallazgos preliminares mostraron que el rango de emisiones de carbono de Nexiite puede ser entre un 20 y un 36 por ciento menor en comparación con el concreto Portland, el estándar de la industria. Además, las pruebas de fuerza del concreto solicitadas por Nexii a Metro Testing & Engineering, también en la Columbia Británica, revelaron que Nexiite endurece más rápido y puede alcanzar su fuerza máxima en siete días, en vez de 28.

En la actualidad, Nexii tiene 400 empleados y dos plantas de fabricación en Canadá. La empresa planea crecer y ganar escala mediante un modelo de franquicia conforme al cual certificará y otorgará licencias a fabricantes locales de toda la región de América del Norte para que produzcan sus paneles ecológicos de construcción. El plan es darles acceso a los propietarios de las plantas a Nexiite, así como a los sistemas y procesos necesarios para producir los paneles de construcción de Nexii. Una vez obtenida la certificación, estos fabricantes podrán comercializar y vender los productos de construcción de Nexii en sus regiones. Diez plantas de fabricación en América del Norte se encuentran en distintas etapas de desarrollo, incluida una en Hazleton, Pensilvania, que abrió sus puertas en octubre, y otra que se inaugurará pronto en Pittsburgh. Los fabricantes pagan una cuota para obtener la licencia, además de entregarle un porcentaje de sus ventas a Nexii.

El mayor reto que enfrenta ahora la empresa, indicó Robertson, es lograr la escala con la rapidez que esperan sus directores y más de mil inversionistas.