El sanguinario sicario habría asesinado alrededor de 250 personas bajo las órdenes del entonces líder del Cártel de Medellín y su lealtad hacia “El Patrón” lo convirtió en uno de sus hombres más cercanos.
A pesar de haber asesinado a cientos de personas, “Popeye” jamás mostró arrepentimiento o dolor al confesar sus crímenes ya que su lealtad hacia Pablo Escobar era incorruptible.
Sin embargo, uno de estos macabros crímenes lo marcó para toda la vida: el asesinato de su novia, Wendy Chavarriaga Gil.
Antes de involucrarse con Jhon Jairo Velásquez Vásquez, Wendy Chavarriaga fue una de las decenas de amantes que tuvo Pablo Escobar a lo largo de su vida, pero su relación con “El Patrón” se acabó tras resultar embarazada y ser forzada a tener un aborto clandestino.
“Es uno de los episodios más dolorosos de mi vida. Era una mujer muy hermosa, podía ser una reina de belleza. Ella había sido novia del patrón, pero quedó embarazada y para él la familia era sagrada. Un hijo fuera del matrimonio era impensable. Entonces la hizo abortar a la fuerza y a partir de ese momento ella decidió vengarse”, indicó Popeye en una entrevista en 2015.
Después de terminar su amorío con Pablo Escobar, Wendy y “Popeye” comenzaron una relación sentimental semanas después de que el entonces líder del Cártel de Medellín obligara a la joven a abortar.
“Como al patrón había que informarlo de todo, le pedí permiso para ennoviarme con ella, me lo dio, pero me dijo que tuviera cuidado”, comentó.
Sin embargo, el sicario no sospechaba que Wendy solamente estaba con él para obtener información sobre Pablo Escobar, ya que se había convertido en informante del Bloque de Búsqueda como venganza tras ser obligada a abortar.
Finalmente, a raíz de algunas sospechas sobre las intenciones de la joven con “Popeye”, el líder del Cártel de Medellín intervino en sus llamadas telefónicas y descubrió que Wendy se encontraba colaborando con la policía colombiana, la CIA y la DEA.
“El patrón me llamó, me puso el casete y me dio la orden. ‘Popeye, vaya y mátela’. Como las órdenes no se discutían, me tocó”, relató Jhon Jairo.
Como era de costumbre, “Popeye” no dudó ni un segundo y siguió al pie de la letra cada una de las indicaciones de Pablo Escobar para asesinar a su entonces novia.
“Yo le puse una cita y le mandé cinco sicarios para que acabaran con ella. Usted no sabe lo que es matar a una persona a la cual uno adora”, confesó el sicario.
La lealtad de “Popeye” hacia Pablo Escobar era tal que el ex sicario del Cártel de Medellín confesó en reiteradas ocasiones que mataría a cualquier persona para proteger a su patrón.
“Si a mi Pablo Escobar me hubiera pedido que matará mi padre, y mi padre hubiera cometido algo gravísimo en contra de la organización o en contra de mí, lo hubiera hecho”, reveló.