El acuerdo inició en 2013 durante la presidencia de Cristina Kirchner y su sucesor, Mauricio Macri, promovió su ejecución. La obra implicaría 8 millones de dólares, pero el régimen chino se había comprometido a financiar el 85 por ciento de la obra por 20 años, según una publicación que hace Infobae.
“El punto central es que el reactor en cuestión -Hualong One- no está en funcionamiento en ningún lado, ni en China. Están todos en construcción”, dijo un experto en la materia al medio argentino y que prefirió omitir su nombre para mantener bajo perfil.
Actualmente hay seis plantas en el mundo, pero ninguna ha sido probada.. Dos se encuentran en Guanxi y dos en Fuqing, China; dos en Punjab, Pakistán y la de Argentina, que arrancaría este año pero se desconoce su fecha de culminación.
Por su parte, el presidente argentino Alberto Fernández dijo a medios que está evaluando el convenio y todas las negociaciones se han dado con hermetismo.
Una de las preocupaciones más latentes es la poca calidad de la industria nuclear china. Detrás, como telón de fondo, se encuentran eventos como el de Fukushima, la planta que provocó un desastre ambiental tras el terremoto de 2011 en Japón, y el accidente nuclear de Chernobyl.