La infanta, de 49 años, está acusada de delitos fiscales en relación con los negocios de su esposo, el exmedallista olímpico de balonmano Iñaki Urdangarin, convertido en hombre de negocios.
Cristina deberá sentarse en el banquillo de los acusados en una fecha que está aún por determinar.
Urdangarin, de 47 años, es sospechoso de haber utilizado su posición en la familia real para obtener contratos de dos gobiernos regionales mediante una entidad sin ánimo de lucro, el Instituto Noos, que él presidía. Las cantidades concernidas ascienden a unos US$6.6 millones.
El juez José Castro sospecha que la infanta Cristina cooperó “activamente” con Urdangarin utilizando para fines personales una parte del dinero presuntamente malversado, mediante una empresa pantalla, Aizoon, propiedad de ambos a partes iguales.
Tras cuatro años de una instrucción que contribuyó a hundir la imagen de la monarquía española y a la abdicación en junio del rey Juan Carlos I, el juez instructor José Castro ordenó el 22 de diciembre el procesamiento de la hermana de Felipe VI. Algo inédito en la monarquía española.
La Infanta Cristina e Iñaki Urdangarín se casaron en 1997; ambos están envueltos en un escándalo
de corrupción. (Foto Prensa Libre: Internet).