El vecino Roberto Pivaral dijo que en cerca de la mina permanece un grupo de pobladores como muestra de resistencia porque el Gobierno extendió a esa empresa una licencia de explotación.
“Nosotros continuamos manifestando pacíficamente sin insultos de nada. Vimos que seis compañeros caminaban para su aldea; venían de trabajar, otros de una consulta médica en Mataquescuintla, cuando fueron atacados por guardias de seguridad”, dijo Pivaral
Bomberos Voluntarios trasladaron a los heridos al Hospital Regional de Cuilapa, donde cuatro de ellos fueron atendidos por rozones de bala, a eso de la 1.30 horas de este domingo y después fueron dados de alta. Adolfo García y su hijo fueron trasladados al hospital Roosevelt.
El comisario Pedro López, confirmó que fueron guardias de seguridad los que dispararon contra los pobladores, aunque ellos aducen que los insultaron y les lanzaron piedras, y por eso accionaron sus armas, pero será el Ministerio Público el que deduzca responsabilidades.
Andrés Dávila, vocero de la mina San Rafael manifestó: “Lamentamos los hechos ocurridos el sábado, y mantenemos nuestra disposición y apoyo a las autoridades para que realicen las investigaciones del caso. La minera se ha caracterizado por ser una empresa respetuosa de la vida y comprometida con el desarrollo de sus vecinos y
continuará trabajando en beneficio de la comunidad, de la región y del país”.