Con 123 votos a favor y nueve en contra, la reducción del impuesto de circulación se aprobó de forma permanente.
Durante la discusión de esta iniciativa, Roberto Alejos, de la bancada Todos, indicó: “Reconocemos el error de haber votado por la reforma tributaria y nos alegra sobremanera que el señor presidente este reconociendo el error”.
Representantes de la Unidad Nacional de la Esperanza (UNE) rechazaron la amnistía fiscal, por considerar que no abona al fortalecimiento de la cultura tributaria, pero se mostraron a favor de la reducción del cobro del impuesto de circulación a plazo permanente.
“Los fondos del impuesto de circulación deben utilizarse para el sostenimiento del transporte público”, dijo Carlos Barrera de la UNE, pidiendo al presidente que intervenga el transporte para garantizar la seguridad de los usuarios.
Encuentro por Guatemala también rechazó la amnistía, adujeron que “las políticas tributarias de este Gobierno han sido contraproducentes” y la condonación podría mermar la recaudación de los contribuyentes que si pagan a tiempo.
Pese a estos argumentos, la enmienda que proponía eliminar la amnistía fiscal fue rechazada por los diputados, recibió 15 votos a favor y 118 en contra.
Al aprobar la moción se suspendió de forma provisional la interpelación del ministro de Cultura, Carlos Batzín, que ha acaparado la agenda legislativa desde el pasado 22 de enero por parte del bloque Libertad Democrática Renovada (Líder).
Con la Ley de Actualización Tributaria, impulsada por el gobierno de Pérez Molina, y luego aprobada en 2012 en el Legislativo, el porcentaje de pago para los vehículos incrementó, en algunos casos, hasta tres veces, lo que provocó rechazo en amplio sector de la población.
Hasta el pasado martes, el 35 por ciento de los guatemaltecos había comprado la calcomanía, el plazo para hacer el pago vence el 31 de julio.