“Entonces debemos tener nuestro propio plan”, afirmó durante un foro en Washington, donde el viernes se reúne junto con los gobernantes de Guatemala y El Salvador con su par estadounidense, Barack Obama.
En la reunión, que el asesor del Departamento de Estado estadounidense Thomas Shannon llamó de “inédita”, los líderes discutirán maneras para solventar la crisis humanitaria generada por la masiva oleada de niños centroamericanos que han cruzado solos la frontera estadounidense.
Más de 57 mil niños sin compañía de adultos han llegado ilegalmente a Estados Unidos desde octubre pasado, lo que ha desbordado a las autoridades de los países involucrados.
Pero este jueves los mandatarios centroamericanos se mostraron optimistas.
“La crisis de los niños va en camino de la resolución” y presenta la “oportunidad” de una cooperación regional para atacar a medio plazo la violencia y las fallas de desarrollo económico que están en la raíz del problema, dijo Otto Pérez.
Los países centroamericanos tienen responsabilidades pero “si estamos acompañados con un plan de Centroamérica como ya se hizo en el plan Colombia u otros planes de Estados Unidos no tengo la menor duda de que estaríamos resolviendo de raíz los problemas que están en la froentra” , afirmó.
El plan daría resultados entre cinco a 10 años, señaló Molina.
El Departamento de Estado estadounidense ha destinado US$500 millones a la Iniciativa de Seguridad Regional de Centroamérica (CARSI) desde el 2008.
Pero los mandatarios de Honduras y Guatemala consideran que los recursos son insuficientes.
“Generó expectativas pero no generaron resultados”, dijo Pérez.
“Casi ha sido una burla” , dijo por su parte Hernández.