Amigo de los argentinos Juan Domingo Perón y José López Rega, estuvo vinculado con la dictadura militar argentina (1976-1983) , país del que llegó a obtener la ciudadanía y representó como diplomático en Italia.
En 1981, gracias a las investigaciones de los jueces milaneses de la millonaria quiebra del banco Ambrosiano, los italianos descubrieron la lista con los 962 nombres pertenecientes a la P2, una influyente red de políticos, jueces, empresarios, periodistas, agentes de los servicios secretos y altos militares que el “Maestro venerable” lideraba.
Entre los empresarios figuraba un desconocido milanés, Silvio Berlusconi, quien llegará a ser años más tarde el hombre más rico de la península y primer ministro.
También figuraban unos veinte argentinos, entre ellos el almirante Emilio Massera y el general Carlos Suárez Mason, componentes de la junta militar que gobernó ese país.
Gracias a la investigación de los jueces, que duró 13 años, la logia P2 fue prohibida en 1981.
El nombre de Gelli apareció en casi todos los escándalos de los últimos 30 años, desde la quiebra del mayor banco de Italia de entonces, el Banco Ambrosiano, cuyo presidente, Roberto Calvi fue encontrado ahorcado bajo un puente de Londres en 1982, pasando por Tangentópolis (sobornos de las empresas) y la existencia de una estructura paramilitar secreta de nombre Gladio con el objetivo de impedir que los comunistas italianos llegarán al poder.
El poderoso líder de la P2 fue condenado por apropiarse de secretos de Estado, calumniar a magistrados e intentar desviar las investigaciones por el atentado a la estación de Bolonia en 1980.
El ex líder de la logia más exclusiva de la masonería italiana logró fugarse de una cárcel suiza en agosto de 1983, se refugió en América del Sur, donde gozó siempre de amistades influyentes, y se entregó a la justicia en Suiza en 1987.
Nacido 21 de abril 1919 en Pistoia, Toscana, Licio Gelli militó durante su juventud en el fascismo y fue voluntario en España para luchar junto al general Francisco Franco, por lo que fue recibido a su regreso a Italia por el mismo dictador Benito Mussolini.
Pero ya la víspera de la caída del fascismo, Gelli, que comenzaba a dominar el arte de la manipulación y el chantaje, usó a los partisanos italianos de Toscana para obtener la benevolencia de las autoridades locales comunistas. Después de la guerra, sin embargo, volvió a su primer amor al unirse al Movimiento Social Italiano (MSI, neofascista) .
Según la prensa italiana también fue agente de los servicios secretos de Estados Unidos, la CIA, en los años posteriores a la Segunda Guerra Mundial. Entró a la masonería en la década de 1960, creó la logia P2 en 1970, logrando infiltrar gradualmente todas las instituciones del Estado y las altas esferas de la sociedad.