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Alcaldía indígena de Nebaj se opone a hidroelectricas la región Ixil

Las autoridades indígenas de Nebaj, Quiché, aseguran que continuarán con las acciones legales para no permitir la construcción de hidroeléctricas en la región Ixil.

Integrantes de la alcaldía indígena de Nebaj, Quiché, se reúnen para tratar el tema de los megaproyectos. (Foto Prensa Libre: Héctor Cordero)

Integrantes de la alcaldía indígena de Nebaj, Quiché, se reúnen para tratar el tema de los megaproyectos. (Foto Prensa Libre: Héctor Cordero)

Luego de que Antonio Malouf, del Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras (Cacif) declarara que los tres poderes de Estado deben asumir la responsabilidad de preservar el desempeño de la economía nacional, Miguel de León, alcalde indígena de Nebaj, comentó: “Seguiremos con las acciones legales para no permitir la construcción de hidroeléctricas en la región Ixil sin antes realizar una consulta comunitaria”.


De León se refería así a un comunicado emitido este miércoles por la Cámara de Industria de Guatemala, en la que, entre otras cosas, señala: “El objetivo del Convenio 169 de la OIT pretende el desarrollo, la integración y la inclusión de los pueblos indígenas, no así la suspensión arbitraria de proyectos en inversiones que generan trabajo, desarrollo e ingresos fiscales para el país”.

El líder indígena cita que el comunicado señala que la postura de de las comunidades indígens al invocar el Convenio 169 de la Organización Iternacional del Trabajo (OIT), en relación a las consultas comunitarias, han sido contradictorios y han causado un impacto económico fiscal y social, por lo que acusó al Cacif de estar saqueando al país en nombre de la Constitución Política de la República.

“Nosotros solo estamos utilizando las mismas herramientas jurídicas que históricamente ellos han utilizado para aprovecharse de los recursos de las comunidades, sin que los vecinos reciban algún beneficio. Como pueblos indígenas tenemos derecho de reclamar los derechos que están en la Constitución Política de la República, el sector empresarial debe entender que no es el dueño del país, sino los guatemaltecos”.

Proceso

De León recordó que el proceso que llevan de consulta de construcción de las hidroeléctricas Vega 1 y Vega 2 en Nebaj está detenido por la falta de interés del Ministerio de Energía y Minas de cumplir con los requerimientos para realizar la consulta ordenada por la Corte de Constitucionalidad, sobre la construcción de hidroeléctricas.

Seguiremos con las acciones legales para no permitir la construcción de hidroeléctricas en la región Ixil sin antes realizar una consulta comunitaria.


“Creemos que la consulta tiene que realizarse y debe aplicase de acuerdo a nuestras costumbres, como lo establece el convenio 169″, expresó. 

“Las hidroeléctricas que están instaladas en la región Ixil de Quiché generan 178 megavatios y si usted me pregunta cuantas comunidades cuentan con energía eléctrica en la región son pocas. Además la calidad de energía que tienen las cabeceras municipales es mala, entonces de que desarrollo hablamos”, comentó De León, quien añadió que esas acusaciones son únicamente para desvirtuar los procesos de consulta, lo cual no le conviene al sector empresarial que son los únicos beneficiados.

Las autoridades indígenas de la región Ixil tiene tres procesos en contra de la construcción de hidroeléctricas en la región, además han sido parte activa en su oposición al funcionamiento de las ya instaladas en Chajul y Cotzal.

En las últimas reuniones de consulta también surgió otro grupo que apoya la construcción de estos proyectos en la región, lo que ha provocado enfrentamientos y división dentro de las mismas comunidades.

Además, meses atrás se confirmó una consulta comunitaria en Sacapulas, donde se rechazó los proyectos de explotación minera en ese municipio. La consulta se realizó por organizaciones comunitarias de Sacapulas pero no estuvo incluido el Ministerio de Energía y Minas.

ESCRITO POR:

Héctor Cordero

Corresponsal de Prensa Libre y de Guatevisión con 16 años de experiencia. Reconocido por varias organizaciones civiles y de prensa. Premiado por el Instituto de las Americas en San Diego, Estados Unidos.